Según Dailymail, una plaga de unas 30 serpientes de distintos tamaños comprendidos entre los 3 y los ¡¡¡8 metros!!! está invadiendo Londres. Por suerte no son venenosas, pero entrañan una gran amenaza para las especies de perros y gatos que habitan las zonas afectadas.
Las proximidades del Regent’s Canal es la ubicación de estos animales de lengua viperina. Se cree que pudieran ser los descendientes de serpientes que se escaparon del zoo de Londres, pero no hay una total certeza de ello.
Ahora, las autoridades londinenses actuarán conforme a la ley de Vida Silvestre y Campo de 1981 para evitar que se propaguen y se aclimaten en los alrededores. Así, las serpientes se enfrentan a una persecución y matanza para hacer valer esta ley y para no hacer peligrar las especies autóctonas del país.