Lo más obvio es que si una marca paga por un soporte publicitario sea para anunciar sus mensajes. Pero, ¿qué pasaría si los mensajes que lanza son los que han creado sus consumidores? Esto es lo que ha hecho la marca de cerveza australiana Coopers para abrir el nuevo año 2016.
La acción ha consistido en ceder nada más y nada menos que 52 vallas publicitarias de las principales ciudades de Australia para que sus consumidores felicitaran el año como quisieran y a quien quisieran, de una manera muy diferente a la que estaban acostumbrados en años anteriores.
Bajo el lema “Shout out”, la agencia KWP! Advertising creó una web en la que todo el mundo podía personalizar su mensaje, la ubicación y la fecha concreta, para después ser mostrado en la valla publicitaria la marca. ¡MO-LA!