En publicidad exterior hay que destacar para ganarse la atención de los transeúntes, ya que hay miles de impactos publicitarios por todas partes. Por eso hay que hacer cosas especiales para que no pasen desapercibidas, y esto es lo que ha hecho la pastelería Mr. Kipling de la mano de la agencia JWT Londres, que acertó en aceptar la propuesta de los creativos.
La campaña de exterior que propuso la reconocidísima agencia no es para nada convencional, pues pensó que la mejor manera de vender los productos de Mr. Kipling era metiendo pasteles reales a dicha valla publicitaria. Pero nada de meterle 4 o 5 pastelitos para adornar, no. Si se hace, se hace a lo grande, por eso la valla publicitaria iba a ser montada completamente por los dulces de esta pastelería, creando un mosaico muy colorido. Nada más y nada menos que 13.360 pastelitos. ¡Bravo!
Visto en Adweek.