Universos en implosión: Satoshi Kon. Superando los límites de la realidad

Íntegra en Ultramundo: 

http://cineultramundo.blogspot.com.es/2013/02/critica-de-satoshi-kon-superando-los.html

Leer (…)Vamos, que a priori todo es bueno. Hasta el enigmático y sensual diseño de la portada, un fenomenal combinación de grafismos, colores e imágenes distintivas del Universo Kon. Lo que ocurre es que en cuanto traspasas esa portado comienzan los problemas.

Digamos que el estudio tiene una serie de problemas estructurales y otros, más pequeños, particulares. El original es su adscripción al ámbito universitario, de estilo tesis, dando a veces la impresión de ser material de consumo interno, dirigido a legitimar una serie de estudios dentro de ese ámbito en lugar de primar la idea de una trabajo enfocado al público más cinéfilo, cuando no generalista.

El libro es tan minucioso que termina por angustiar. De estructura encorsetada y un intermitente tono plomizo que sobrevuela el conjunto y queda expuesto en toda su crudeza en una introducción de libro de texto que a lo único que invita es a ponerse a leer otra cosa. Y eso a pesar (o precisamente por) de los esfuerzos de los autores por resultar didácticos, accesibles, y acabar por parecer faltos de nervio, de pasión por lo que se está escribiendo, y más cuando se trata de un cine tan absorbente, emocional y al tiempo cerebral como el de Kon.

Pero el mayor problema es de redundancia. Este es en realidad el gran peligro de toda obra colectiva sobre un autor concreto. Si uno plantea demasiados textos y no existe la comunicación necesaria algunos de ellos terminaran por ser superficiales, subsidiarios con respecto a otros, y a través de todos se repetirán elementos que terminarán por aparecer como incómodos lugares comunes. En el presente volumen esto ocurre principalmente en sus primeros capítulos, quedando minimizado cuando al fin se entra a pormenorizar cada una de las obras de Kon.

Los dos primeros capítulos concentran tal cantidad de reiteraciones que parecen repetidos. La similitudes son tales que la fusión de ambos en una sola introducción hubiese aligerado el conjunto de manera notable, ofreciendo una apreciable síntesis de la carrera/motivos/estilo/influencias de Kon. En cualquier caso este encadenado de introducciones y presentaciones-resumen ralentizan la lectura porque no aportan demasiado con respecto a lo que vamos a leer después y revela una obsesión formalista sobre la planificación del libro que impide que este sea fluido, orgánico, con los temas apareciendo cuando son necesarios en lugar de forzarlos dentro de un corsé programático.(…) Continuar

Si se puede analizar demasiado una obra, si se puede pecar de ser minucioso de más este libro y sus autores lo hacen. Son tan exhaustivos que agotan tanto al actor como al objeto. Cada película es escrutada en todos su aspectos como si de un horro vacui analítico, pero de tanto mirar las partes a veces el conjunto queda difuminado –amen de poder constatarse lagunas tan notorias como la ausencia de mención al giallo de la muy gialloesque Perfect Blue-. Nuevamente una labor de compresión hubiese beneficiado al conjunto, permitiendo que temas ya tratados se tocasen solo tangencialmente y desatando a los autores para permitirles acercamientos más personales y menos escolásticos.

En todo caso esto es una pega relativa, ya que el esfuerzo, la penetración y la profundidad de análisis solo puede definirse como portentoso –mención especial para el capítulo centrado en la magistral Paprika-, explorando el vasto imaginario de Satoshi Kon desde perspectivas psicoanalíticas (jungianas), metaficcionales, autobiográficas, narratológicas, plásticas, cinemáticas, cinéfilas, sociales, posmodernas, humanistas… para descubrir un universo interconectado, compartido por todas sus obras. Yuxtapuestas entre ellas como las capas de realidad que conforman su narrativa especular.

Un extracto brillante, que abundan, al principio del capítulo sobre Perfect Blue resume la praxis y la teoría de un cineasta del siglo, conmovido por “la fragilidad de la identidad humana así como la posibilidad de unir los deseos colectivos en figuras simbólicas que habitan espacios virtuales o ficcionales pero que, al mismo tiempo, pueden saltar hacia el plano de lo “real”, desequilibrando aún más a unos personajes continuamente en tensión”.(…) Continuar