Revista Psicología

Uno de cada tres adultos tiene problemas para dormir

Por Cambiopositivo


Uno de cada tres adultos tiene problemas para dormir. En el dormir bien no hay preocupación en ello además de una sensación buena de vitalidad para la  persona. Hay una importante conexión entre mente-cuerpo. Las personas que presentan dificultad en esta función tan necesaria para la vida mencionan una ansiedad anticipatoria con el sólo hecho de tener que ir a la cama y no poder lograr un sueño reparador o de buena calidad. Ante esta dificultad y entendiendo que es un síntoma tendremos en cuenta algunas premisas que puedan facilitar el proceso. "El sueño es el cuidador de todos los seres vivos". El sueño repara, fabrica, memoriza, relaja. Cuando vayas a la cama y no puedas dormir recuerda: -Ausencia de preocupaciones -  utiliza la actitud de permitir al menos cerrar tus ojos y ayudar al cuerpo a que se restablezca mediante el descanso y la quietud física. -Asume que  descansas y disfruta de esto y de la normalización del sistema corporal. -Entiende que hay un desequilibro y un desorden y ayuda a restablecerlo con tu mente. -Al liberar tensiones y fatigas pueden  aumentar los pensamientos recurrentes y reconoce tu inquietud mental; aún así permite que tu mente se estabilice. -Descansa, y deja que el proceso de auto-reparación tome su curso de forma natural. -Recuerda que cada evento mental produce un efecto físico. -Reorienta el foco de atención de tus pensamientos hacia las sensaciones corporales para luego al observar los pensamientos que les acompañan puedas empezar a modificar creencias. -Elige una hora temprana y la misma cada noche como rutina -Descansa cómodamente con los ojos cerrados y dirige tu atención suave al cuerpo "valioso descanso" -Trae a tu conciencia que esos pensamientos de inquietud representan el proceso de curación que se    está dando y es necesario. -Enfoca tu mente en la sensación corporal y al soltar los pensamientos desengranas ambos y disipas la fuerza de la ansiedad ( la emoción).
Hay muchas situaciones que se interponen con nuestro destino. Date cuenta que es lo que más te da satisfacción y trabaja en ello. La falta de propósito y de realización puede estar influyendo.
REORIENTA EL FOCO DE ATENCIÓN Pregúntate: Cual es mí propósito? Que me hace feliz? Como puedo sentirme realizado? Toma conciencia del momento presente y encuentra el sentido de tu vida . La satisfacción trae mayor concentración , te aclara y te relaja. Experimenta las cosas tal como son, alcanza tu equilibrio natural y se flexible contigo mismo.


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