Se acaba el serial sobre Sergio Rodríguez en este blog con el final que, al menos un servidor, ni esperaba ni celebra. Mañana martes se hará oficial lo que era oficioso desde hace un mes: que Sergio Rodríguez jugará en el Real Madrid la próxima temporada. Después de que, al parecer, al menos Knicks, Bobcats, Grizzlies y Heat hubieran preguntado por el canario, Sergio se ha decantado por la opción de volver a Europa.
La oportunidad ahora luce mejor que nunca, pero no probablemente para el jugador, si no para todos aquellos que llevan cuatro años presumiendo de que ellos sabían que Sergio Rodríguez se había precipitado, o para aquellos que decían que no estaba maduro, que no es jugador para la NBA, que se había equivocado. Ahora además, la mayoría de ellos estarán con la guadaña preparada esperando una debacle de Sergio Rodríguez en el Real Madrid. Es posible que tengan razón, que Sergio se fue demasiado joven a la NBA. Alguna temporada más como jugador de Estudiantes (o de algún equipo que compitiera en Euroliga) le habría venido genial de cara a prepararse físicamente y mejorar aspectos como el tiro o la defensa. Pero Sergio eligió marcharse a la NBA y ser el español más joven en debutar en la mejor liga de baloncesto del mundo. Su balance cuatro años después no es lo que se esperaba, pero su última media temporada en los Knicks dejaban la puerta abierta a un futuro más longevo en la Liga en un estilo acorde al suyo y bajo un entrenador que le diera confianza.
Pero lo más inexplicable de todo es que Sergio Rodríguez decide abandonar la NBA justo el año en que es Agente Libre y donde aquella franquicia que intente hacerse con sus servicios es porque confía en él y le van a dar confianza. Económicamente, su contrato con el Real Madrid es menor que una Qualifying Offer que pudiera recibir de alguna franquicia NBA, así que suponemos que Sergio busca minutos y sentirse importante y de alguna manera, volver a la Selección Española. ¿Es el Real Madrid su mejor destino? Sergio iría a ocupar la posición de base suplente en un Real Madrid donde la manija de juego que marca Messina la lleva Pablo Prigioni, diametralmente opuesto a Sergio Rodríguez, y que disputa casi 30 minutos por partido. Veremos qué rol ocupa Sergio en el Real Madrid.
En este loco verano de Agentes Libres en la NBA Sergio Rodríguez podría haberse ganado un puesto en muchas franquicias ganadoras de la Liga como segundo base con un sueldo de unos 3'5 ó 4 millones de dólares y gozando de confianza. Al final ha elegido la solución fácil, la de volver al baloncesto español a un club de primera línea donde tiene mucho más que perder que ganar. Una solución que nos deja sin terminar de ver explotar a uno de los mayores talentos que ha dado el baloncesto español en la NBA. Disfrutaremos de su baloncesto en la ACB. Buena suerte al Chacho. Me parece que la necesitará.