Ya sabemos que muchos estados se han enfadado con Julian Assange por hacer públicos muchos documentos, ¿Será que están celosos de que les hayan quitado su trabajo? Desde mi punto de vista todo lo que ha sacado a la luz Wikileaks, debería ser de nuestro conocimiento; lo último es lo que va a aportar el ex banquero suizo Rudolf Elmer, que fue empleado del banco Julius Baer (en las Islas Caimán), del que fue despedido; proporcionará a Wikileaks los nombres de unos 2.000 clientes de bancos suizos que habrían usado el secreto bancario para evadir impuestos.
Qué bien nos vendría toda esta información para reactivar la economía y olvidarnos de extender la edad de jubilación o continuar con los recortes; sería un sueño hecho realidad si se logra captar ese dinero que tantos multimillonarios han dejado de aportar al estado con su evasión de impuestos.
Obviamente que Rudolf Elmer también irá a juicio, pero los cristianos son testigos de que todo aquel que diga la verdad seguramente será crucificado. A pesar de que Wikileaks no ha dicho nada nuevo, me gusta que corrobore una vez más lo que la mayoría de la población mundial conoce pero se niega a aceptar.