Revista Ciencia
Finalizando la jornada del día Sábado 6 de Mayo en horas de la tarde cuando salíamos de San Antonio a recorrer nuevamente sus caminos vecinales, pudimos encontrarnos con Willy y Anibal con una numerosa bandada de estas urracas. Muchos fueron los sobrevuelos que realizaron sobre nuestras cabezas así que no estaba para desaprovechar la oportunidad de lograr algunas tomas de estas aves en vuelo; cuando el reloj no nos corre nos podemos dar el lujo de buscar un buen lugar despejado con el sol a nuestras espaldas con la finalidad de obtener algún tipo de ventaja, cosa que no ocurre de seguido durante una cacería fotográfica de aves.