Valencia es lo más

Llevaba tiempo queriendo visitar Valencia, el tercer municipio por población de nuestro país y la ciudad europea que más ha crecido en número de turistas en los últimos años, y la verdad es que tiene su porqué.

Esta ciudad mediterránea mezcla pasado – se fundó como colonia romana en el año 138 a.c.- y presente de una forma coherente. No en vano está considerada como una de las ciudades más trendy de Europa.

En la Ciutat Vella hay que destacar el Mercat o Mercado Central de Valencia, un emplazamiento en el que se ubicaba la feria semanal desde la edad Media hasta el Siglo XX, y que no puedes dejar de visitar. Se trata de un precioso edificio modernista que combina metal, vidrio, cerámica y que cuenta con dos cúpulas (la más alta está rematada por una veleta con una cotorra) y columnas que recuerdan al gótico.

En su interior puedes ver, oler, saborear productos de la zona desde una deliciosa horchata hasta platos tradicionales como unas clotxinas al vapor, un esgarraet con bacalao o un all i pebre de rape en el Central Bar de Ricard Camarena (Estrella Michelin).

Su casco histórico cuenta con un patrimonio histórico y monumental muy importante. Entre sus monumentos más importantes se encuentran la Lonja de la Seda del siglo de oro valenciano y Patrimonio de la Humanidad desde 1996, La Catedral de estilo Gótico Mediterráneo con su torre campanario o El Miguelete, las Torres de Serrano y las de Quart que quedan en pie de la antigua muralla…

Sus plazas son preciosas y están llenas de vida: la plaza de la Reina, de la Virgen o de la Almonia con su Centro Arqueológico, la Plaza del Ayuntamiento o la Plaza Redonda. En la Plaza del Ayuntamiento se pueden visitar hasta el 6 de mayo siete esculturas monumentales de Henry Moore, una muestra de la exposición itinerante Arte en la calle.

Valencia cuenta con muchos Palacetes o mansiones aristocráticas como el Palacio de Benicarló (actualmente sede de las Cortes valencianas) o el de la Generalidad.

La plaza de toros de estilo neoclásico (S. XIX) o la estación del Norte (S. XX) son dos monumentos emblemáticos de la ciudad.

La zona del Eixample y Russafa son otro ejemplo de arquitectura modernista con el Mercado Colón como estandarte. Un gran espacio de tres naves, dos grandes marquesinas laterales y estructura de hierro, con claraboya de cristal en la parte central. La piedra y los azulejos formando mosaico con motivos típicos de la huerta valenciana, son dos de sus características principales. En él podréis comer o tomar un tentempié  como un nacional (café granizado con bola de helado de leche merengada o vainilla) o una refrescante horchata con fartons (aquí se encuentra otro punto de la conocida Horchateria Daniel de la Alboraya así como de la Casa de l’Orxata aunque la ciudad esta repleta de buenas horchaterías).

En esta zona encontramos diseñadores, entre ellos al valenciano Francis Montesinos, y una gran variedad de tiendas interesantes para amantes de la decoración como el showroom Vicente Navarro en el que encontramos productos de Gandía-Blasco, Patricia Urquiola, Nani Marquina…

Por otro lado hay que destacar la zona moderna con la Ciudad de las Artes y las Ciencias y la Marina (entre las playas de la Malvarrosa y de las Arenas).

La Ciudad de las Artes y las Ciencias – obra de los valencianos Santiago Calatrava y Félix Candela- discurre a lo largo de casi dos kilómetros del antiguo cauce del río Turia. Este impresionante conjunto único está dedicado a la divulgación científica y cultural y está integrado por seis grandes elementos: el Hemisfèric (cine IMAX y proyecciones digitales), el Umbracle (mirador ajardinado y aparcamiento), el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe (innovador centro de ciencia interactiva), el Oceanogràfic (el mayor acuario de Europa con más de 500 especies marinas) y el Palau de les Arts Reina Sofía (dedicado la programación operística). Y el Ágora, que dota al complejo de un espacio multifuncional.

Cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias se encuentra un restaurante en plena huerta valenciana, La Alquería del Pou, un restaurante muy agradable en el que comimos un fantástico arroz del señoret y una exquisita paella valenciana.

Otra de las cosas interesantes de la ciudad es que además de estar situada a orillas del mar, está situada a orillas del río Turia, cuyo cauce fue desviado tras la gran riada de Valencia en 1957. El antiguo cauce que atraviesa el centro de la ciudad se ha convertido en el jardín del Turia, un espacio lúdico-cultural de 10 kms. en el que se ubican proyectos tan interesantes como el Parque Gulliver.

Destacan los 19 puentes que unen las dos zonas de la ciudad algunos antiguos como el Puente de la Trinidad (siglo XV).

Hasta los contemporáneos como el Puente de las artes de Norman Foster quien también diseño el Palacio de Congresos en 1998, el de la Exposición de Calatrava o el de las Flores adornado con 27.000 flores que varían según la época del año.

Otra de las cosas interesantes de esta ciudad es que es cómoda de visitar ya que es totalmente plana por lo que también existe la posibilidad de alquilar bicicletas.

Para completar la oferta artística de la ciudad el IVAM que este año cumple 25 años de existencia y el Museo de Bellas Artes con obras de Sorolla son una cita obligada.

Y para terminar y como gran amante de la gastronomía mediterránea que soy una reseña a sus productos más auténticos.

Arroces de la albufera de todas formas y colores (paellas entre las que destaca la tradicional con conejo, caracoles y verduras, del Señoret, negro, al horno…) y que pronto espero tener en mi sección de delicatessen, fideuás, verduras de la huerta como las alcachofas de Benicarló, pescados, clochinas, langostinos de Vinaroz y por supuesto los pasteles (coca de llanda, fartones, mona de pascua, buñuelos de calabaza…).

Respecto a bebidas destacar la horchata, para mí una bebida de dioses que tenemos que agradecer a los árabes y que al proceder de la chufa -un tubérculo- tiene un montón de propiedades nutricionales. Por cierto si te gusta granizada como a mi hay que pedirla expresamente. También sus caldos entre los que destaco el Mistela (vino dulce de la uva Moscatel) y ¡cómo no! el agua de valencia.

Seguiría contandoos más cosas pero mejor acabar con una de las frases de Lolita Butterfly que lo dice todo: Valencia es lo más.

Love, Pitita.