La guerra, creo que no hay nada que nos aterrorice tanto y que a su vez nos resulte, a posteriori y siempre desde el punto de vista que nos da el contexto histórico, tan perturbadoramente atractivo. En un conflicto armado se genera tanta tensión, y hay tantos miles de personas involucradas, que es fácil ver ambos lados de los extremos del comportamiento humano, la mayor de las ruindades o la mayor de las bondades, auténticos héroes y los villanos mas despreciables, pérdidas irreparables y vínculos de amistad mas fuertes que cualquier cadena. La guerra, esa contienda en las que sufren todos menos los que la desencadenan y que cambió radicalmente entre 1914 y 1918, durante la Primera Guerra Mundial, conflicto sorprendentemente olvidado tras la capacidad de absorción de la segunda gran guerra.
Desde un punto de vista bélico la Primera Guerra Mundial es mucho mas interesante que la segunda. No voy a ponerme a daros una clase de historia, pero en aquel conflicto es donde empezó la guerra moderna. Ametralladoras, vehículos blindados oruga, trincheras, alambres de espino... todos estos elementos tan iconográficos se empezaron a usar en ese momento, o como mínimo a perfeccionarse, lo que os dará una idea de lo importante que fue ese periodo para la industria armamentística. Pero Valiant Hearts no va de eso, el nuevo juego de Ubisoft Montreal (qué ojalá no lo cierren) va de héroes, pero no siempre desde un punto de vista estrictamente militar. Todos hemos oido hablar de las hazañas del Barón Rojo (quizás único personaje de la primera gran guerra que tiene la misma popularidad que los protagonistas de la segunda) pero en este juego seremos testigos de la historia de una familia separada por el conflicto y de los pocos leales amigos que harán en la trágica situación.
Esto que voy a decir es un tanto polémico, pero lo de menos en Valiant Hearts es que es un juego. Se puede decir que entra dentro del género puzzle/habilidad pero lo cierto es que el apartado jugable es solo una excusa para narrarnos la increíble historia que nos cuenta. Generalmente es al revés, un gameplay se ve rodeado de un guión que lo complementa, aquí no y eso es un elemento muy a tener en cuenta a la hora de gastarse los 15 euros que cuesta el título de UBI. La sencillez es la norma predominante durante todo el desarrollo, yo me he atorado un par de veces, pero ha sido mas por no entender bien lo que me estaba pidiendo el juego que por la dificultad que realmente entrañaba (vamos, que estaba espesito en ese momento). Básicamente tenemos que ir interactuando con los objetos y personajes que nos encontremos para ir superando las pequeñas pruebas que se nos ponen por delante, sin mucha mas historia. Aunque también hay zonas de habilidad (como las de conducción o de sanación) en las que deberemos tener algo mas de maestría con el pad, pero nada especialmente complicado la verdad.
El encanto del juego es el de dejarse envolver por el intachable apartado artístico en todos y cada uno de sus elementos, por su ambientación, por su historia, por LA historia (continuamente se nos dan pequeñas pildoritas con fragmentos de los hechos reales acontecidos, así como del impacto económico del conflito en paises neturales como España) y por la magnífica banda sonora que nos acompaña durante toda la aventura. Valiant Hearts dota de cierta belleza algo tan crudo como la guerra, y lo hace con estilo propio, con un grafismo muy particular de trazos gordos y no demasiados detalles pero tan expresivo que hará que la inmersión sea total y absoluta. Es curioso como hace una semana os hablaba de Watch Dogs (también de Ubi) y el nulo interés que sus personajes habían despertado en mi, pues en este juego es absolutamente todo lo contrario. Es imposible no empatizar con los personajes que protagonizan la historia, es imposible no angustiarse o alegrar en según que momentos, es imposible que la tensión no te invada en el climax de la historia. Esto para mi es la principal virtud del título por encima incluso de su brutal apartado artístico.
Yo veo a Valiant Hearts como una experiencia narrativa interactiva, un cuento en el que participamos vagamente pero de manera anecdótica. Solo el hecho de buscar objetos secretos en los capítulos (al encontrarlos se nos dará una breve explicación sobre ellos y su contexto en la época, lo cual los hace mucho mas interesantes que un mero coleccionable al uso) da al jugador una opción de salirse un poco del guión establecido, pero da igual, no es algo en lo que estés pensando mientras te dejas llevar por tus nuevos amigos de principos del siglo XX. Valiant Hearts se vende como juego, pero se podría vender como herramienta divulgativa, un modo ameno de dar a conocer un pedazo importante de la historia de la humanidad algo desconocido por la mayoría. No me atrevo a recomendarlo como videojuego, pero si os gusta la temática bélica o histórica encontraréis una pieza de unos valores artísticos y emocionales muy a tener en cuenta.