Autobuses haciendo un descanso en la ruta
Dada mi condición de residente en Canarias, se me hace muy inconveniente en mis viajes por la península, movilizar mi propio vehículo en un trayecto que dura varios días, así como alquilar un coche, debido a los abusos descarados, que la compañías de Rent a Car imponen. Por estas claras razones, en mis últimos viajes estoy haciendo un uso frecuente de las líneas de autobuses que viajan por toda España... por cierto, aquí convendría aclarar que el título del artículo, es una traducción de Viajar en guagua, por la península, ya que en las islas, autobús es guagua y España, península. Dicho esto, me gustaría añadir que viajar en autobús, a pesar de la generalizada idea de que es un medio incómodo y pesado, tiene su encanto y sus ventajas. En los largos trayectos, además de dejar que nuestra mirada se pierda en los paisajes que pasan por nuestra ventana del bus, podemos aprovechar para dar unas cabezaditas, entablar conversación con algún otro viajero ó viajera, aprovechar el tiempo de viaje para leer ese buen libro que nos acompaña ó realizar cualquiera de las otras múltiples acciones posibles, para distraer y relajar nuestra mente.
El viaje en autobús, también puede ser una fuente de inspiración, a la hora de interpretar nuestro viaje, imbuido con el espíritu de las noveladas rutas y aventuras, que escritores como Malcolm Lowry en su novela Bajo el Volcán ó Josep Pla en su Viaje en autobús, han sabido trasladar a la narrativa literaria de viajes.
Paisajes y verticalidad técnica.
Además en estos enrarecidos tiempos de impuesta austeridad, viajar en autobús, es una de las opciones más económicas y prácticas a tener en cuenta, para nuestros traslados por la piel de toro. Ya sabemos que no es tan rápido como el avión, ni tan cómodo como el tren y que de ninguna manera, nos brinda la libertad de elegir rutas y paradas, como cuando hacemos los recorridos en coche... pero en defensa de este medio, que dicho sea de paso cada vez uso de manera más frecuente en mis desplazamientos por la península ibérica, comentaré que viajar en estos últimos medios de transporte mencionados, al final tiene ciertos inconvenientes, insalvables e incómodos. Empezaremos por el avión, que en los trayectos cortos, aunque sea dentro del mismo territorio nacional, conlleva de manera inevitable el obligado transito de entrada y salida, por los aeropuertos, que entre traslados, tiempos de antelación, controles de seguridad y toda la restante parafernalia, resta efectividad y suma horas de espera a este medio. Si decidimos elegir el tren, observaremos que los actuales precios y tarifas de este tradicional transporte, son cada vez más elevados y que la mayoría de sus horarios no son demasiado prácticos. Si finalmente elegimos viajar con nuestro propio coche, podremos movernos con más libertad, aunque el combustible empleado para nuestro trayecto, nos saldrá más caro que el propio billete del autobús y si el coche tenemos que alquilarlo como es siempre mi caso cuando viajo por la península, estaremos en manos de las grandes empresas de alquiler de vehículos, esas que te piden la visa, antes de que salgas con el vehículo de los garajes, para luego poder hacer con la factura final, lo que les da la gana, cambiándote condiciones ó añadiéndote cargos de lo más inverosímiles, etc.
Informaciones útiles:
Spain.info
Viajar por España en autobús
Eroski consumer
Ventajas de viajar en autobús