¡Triunfo apoteósico!, ¡Universo de A ha resistido, Universo de A ha vencido!.
¡La historia ha cambiado!: ¡Constantinopla no ha caído, Zaragoza no se rinde ante el asedio de las tropas napoleónicas, los castros del Monte Medulio y de Numancia resisten a pesar del poder de Roma, y las murallas de Jericó tampoco caen! (tranquilos, no he perdido la poca cabeza que me quedaba, para quienes no sepan de que va el tema, pueden recordarlo aquí), y a la vez confirmamos la historia, pues ni Coruña, y su valerosa María Pita, se entregan ante el pirata Drake.
Me explico, finalmente, y después de que las escasas butacas ocupadas de la Nave 2 del Matadero se fueran desalojando cual estampida (este público evidentemente no leyó la crítica y comentarios de este blog al respecto del tema) en la última representación de la inefable “En el desierto”, se confirmaba la victoria de Universo de A, que había conseguido, y con auténticos records de visitas y mantener hasta el último momento su opinión en la web, a pesar de lo mucho que habían hecho para impedir que esto sucediera; pero este fin último no ha tenido lugar, las representaciones de esta infausta producción han terminado (porque era un teatro público, si hubieran dependido de lo privado, no habrían estado ni la mitad del tiempo), pero Universo de A sigue aquí, brillante, triunfante, invicto… y seguirá, por si alguien tiene la insesatez de permitir que salgan de gira (como hacen otras tantas producciones del Español), para que en toda España conozcan lo que deben saber sobre esta compañía y sus componentes.
Así pues, hoy es el día de la gloria, a pesar de las amenazas, los insultos, las coacciones… etc, Universo de A se lleva la palma de la victoria y sigue ahí, mientras ellos terminan, Universo de A permanece, y es que se ha producido el martirio y triunfo final de Universo de A, ¡que el mal perezca y el bien prevalezca!.
Pero bueno, será mejor que expliquemos, para los que pasen esporádicamente por aquí, el significado de todas estas cuestiones y los titulares estrafalarios que últimamente, se están convirtiendo en una excesiva costumbre en este blog, pero es que la situación es tan absurda y desfasada que no cabe otra cosa que tomárselo con humor, cosas que te enseña la vida.
Bueno, para quien aún no se haya enterado, Universo de A, sufrió ataques contra su libertad de información y de expresión debido a una mala crítica dada a la producción de “En el desierto”, que produjo los ataques de los “artistos” (es que veréis, en alguno de mis círculos, cuando alguien tiene un título que no vale gran cosa, lo llama con socarronería, el “títalo”; y dado que las personas de las que hablo no pueden ser tildadas de “artistas” -y mucho menos sin las comillas-, pero de alguna manera habrá que calificarlos, pues los denominaremos de ahora en adelante como “los artistos”) producidos por una inmadurez digna de patio de colegio (sólo les ha faltado decir “profe, profe, es que Universo de A me ha llamado gordo”) que provocaron el “asedio de Universo de A” y que este blog, que no había hecho nada parecido en casi ocho años de existencia, tuviera que privar a todos sus lectores de la retroalimentación y libertad de opinión característica de este sitio web (todos los detalles aquí); convirtiendo este asunto, en una situación histórica y sin precedentes.
Pero no os dejéis engañar por el título del artículo, pues el asedio, aún no ha terminado, a pesar de mis excesivas precauciones (¡he hecho que sea obligatorio registrarse en WordPress, y aún con eso los comentarios tienen que recibir mi aprobación antes de ver la luz!), aún me sigue llegando algún que otro comentario de forma casi diaria (¡incluso de los que dijeron que nunca jamás volverían a este blog!, ¡pero nunca!), y el tema no deja de resultar muy gracioso, sobre todo porque mezclan el ruego con la amenaza y el insulto, lo cual lo mires como lo mires, es muy divertido (¡son comentarios fascinantemente bipolares, van por parrafos!: en uno se me pone verde y en el siguiente se apela a mi piedad, jajajaja!).
En fin, viendo todo este tema, no se puede dejar de citar a Tácito: “quien se enfada por las críticas, reconoce que las tenía merecidas”, vamos, lo que he dicho desde un principio, todo este asunto me ha dado más legitimidad y prestigio como crítico del que nunca hubiera imaginado ni buscado.
Aunque, de hecho, no creáis que no he pensado en publicar los mejores comentarios en un monográfico dedicado al señor Alberto Velasco (ya que está visto que el tema vende, si es que ya lo decía el empresario de “El fantasma de la ópera”: “al diablo Gluck y Haendel, ¡con escándalos el éxito llegó!”), en el que comentaría, con particular y afilado sarcasmo, su participación en todas las producciones en las que le he visto; e incluiría, al final, algunos de los comentarios de su círculo, corrigiendo sus faltas de ortografía y estilo, además del debido análisis con mi particular sentido de la sátira… uff, pero tengo tan poco tiempo, a lo mejor cuando me vuelvan a bajar las visitas; porque lo cierto es, y no deja de ser algo triste, que mucho me temo que una mala crítica vende más que una buena, así, mientras las “Críticas express: Los justos / En el desierto“, arrasaban en visitas y en ser compartidas en redes sociales, en cambio, “El loco de los balcones“, a la que le he dado la rara calificación en este blog de “obra maestra”, no conseguía ni la mitad del éxito de las primeras malas críticas mencionadas.
Además, si el señor Velasco está tan obcecado en que retire los comentarios a él referidos, bueno, siempre puede probar a escribir (que la escriba él pero que la corrija otro, por favor) una carta abierta de disculpa hacia mí y este blog, que sea publicada a modo de nota de prensa en todos los medios oficiales a su disposición, en la que dé la razón total a mi crítica, reniegue absolutamente de los proyectos en los que ha participado, y por supuesto, haga propósito de enmienda… así, a lo mejor, hasta consigue enternecer mi imperturbable corazón de crítico y espectador… ¡o no!; pero como eso no va a suceder, me despreocupo mucho, jajajaja. En cualquier caso, debe saber que ha conseguido (cosa que supongo que deseaba, pues este señor sabe tan bien como yo que no existe la mala publicidad) llamar mi atención, y que estaré pendiente, en lo posible, de él en un futuro, yo y mi afilada pluma, y que no olvide que cada vez que se suba a escena, puede haber unos ojos escrutadores mirando, pendientes de cada detalle y tomando nota cuidadosamente; y ya puede mandarme al Papa o a los cuatro jinetes del apocalípsis juntos para silenciarme, que siempre será un ameno entretenimiento y un acontecimiento para este blog (ya imagino próximos títulos: “Universo de A, a sangre y fuego contra los artistos”o “Universo de A en guerra, ¡guerra tremenda e inexorable!” jajajaja).
Y por más que se empeñe, mis comentarios no son personales, son cuestiones que afectan directamente al “espectáculo”, el haberle elegido a él y no a otro actor para ese “papel” (si es que se puede llamar así), ha condicionado parte del resultado final, pues sus características físicas son importantes (y hay cosas que resultan gratas de ver y otras que no, pues debo decir, que mis opiniones no siempre son sólo mías, sino de personas que me acompañan o que escucho hablar sobre el tema, y mi primer deber como crítico es informar al potencial espectador para que no vaya desprevenido ante cualquier cosa, y, como siempre, eso es lo que he hecho), y más en un espectáculo de danza, y ya no digamos las dramáticas. Prueba perfecta de ello es que, en el caso de Chevi Muraday (a quien tampoco dejo precisamente bien y puedo decir, con total justicia, que es el que más palos se lleva en mi crítica) no cité características físicas como su evidente alopecia o su más bien poco afortunada dentadura, ¿por qué? pues porque ni tiene que ver, ni influye en el producto final (al igual que si hubiera interpretado a Narciso, a Apolo o a Eros, hubiera sido lo primero que hubiera destacado), en cambio las características físicas y psicológicas del señor Velasco sí. Y por cierto, al señor Muraday apenas le han salido defensores, ¿por qué será?; y lo que es más grave, a día de hoy, no ha aparecido nadie que consiga razonarme, con ningún tipo de argumento, la buena calidad de esta obra, yo ya sabía que era muy indefendible, pero tanto… ni los que participaron en ella creen en lo que han hecho, ¡menudo panorama!.
Por otra parte, tampoco puedo retirar los comentarios a él referidos, pues, y siguiendo sus palabras, ¡sería obstrucción policial! (institución ante la cual, yo, eficiente y voluntarioso, no pondré ningún problema a la hora de proporcionar los IPs vinculados a cada comentario, ¿o que os habíais creído “artistos” y vinculados?, ¿qué internet no deja huellas?, así que, a menos que hayáis escrito vuestras “aportaciones” en un locutorio sin cámaras de vigilancia, ¡pero que mal os veo!) … aunque no me explico como ha presentado, ¡y ha sido aceptada!, una demanda de ese tipo ante la policía, ¿no se supone que hay que hacerlo en el juzgado?, bueno, a lo mejor también en eso se confundió y resulta que lo hizo en la panadería e incluso confundió el azúcar glas con la firma, jajaja, si es que estos “artistos”…. Por otro lado, supongo que le sobrarán recursos como para emprender este largo y costoso proceso judicial, extremadamente difícil de probar, y mucho más de ganar (y más teniendo en cuenta la información que se maneja por aquí, que haría sonrojar a cualquier juez minimamente conservador), por lo que yo en su lugar, iría ahorrando todo lo ganado en las producciones en las que ha participado… aunque siempre puede declarse insolvente, con los consecuentes meses en la cárcel, aunque no sintamos pena, tal vez esté acompañado por unos cuantos “compis” de los que yo sí podré probar otros cargos.
Todo ello sin mencionar su graciosa inquietud por averiguar quien soy, ¡cómo si les fuera a servir de algo! jajaja, sus ocurrentes paranoias han sido de lo más amenas, y en parte me arrepiento de no haberlas fomentado, aunque aún estoy a tiempo: ¿quién seré?, ¿alguien de dentro o tal vez de fuera?, ¿un traidor o un desconocido?, ¿esa persona a la que se sonríe diariamente, o tal vez alguien a quien nunca se ha visto?, ¿hay algún motivo oculto tras una crítica tan devastadora o simplemente lo representado era malo a rabiar? (bueno, eso no es muy difícil de comprobar), ¿viejo o joven?, ¿guapo o feo?, ¿gordo o flaco?, ¿nacional o extranjero?… jajajaja.
Por otro lado, la verdad es que todo este tema ya me está empezando a aburrir (y supongo que al resto de los seguidores del blog lo mismo, con lo cual, seguramente este será el último artículo publicado al respecto, si hay algo más, probablemente lo escriba en un “post scriptum” aquí mismo; sin mencionar, que bastante tiempo he perdido ya escribiendo tonterías en vez de ponerme a redactar y publicar las mil cosas siempre pendientes, porque estas chorradas, quieras que sí quieras que no, sacan un tiempo muy útil), y es que todos los comentarios que me llegan de los “artistos”, o relacionados, son iguales; parecen de plantilla, con exactamente la misma estructura, y encima duele leerlos con un estilo tan nefasto y tanta falta de ortografía; claro, con semejantes personajes que no saben ni escribir, ¿qué arte se puede pretender que hagan?, pero que tristeza más grande, que mal está el panorama en este país… la verdad es que leí algunos, porque era entretenido, pero ahora con echar una ojeada a apenas unas palabras, ya ni hace falta seguir, borrado con hacer un click, no sé que diversión encuentran en esforzarse en escribir algo que no le llega a nadie, no me digas, será para desahogarse, porque otra cosa… ¡ay!, serán las extravagancias de los “artistos”.
Aunque en parte he de reconocer que todo este tema me indigna y enerva, ya no porque hayan pretendido privar a este blog de derechos democrácticos básicos, que también; sino porque encima, lo están haciendo con el dinero de todos, dicho de otro modo, están actuando en la peor tradición del estado totalitario con un arte oficial totalmente libre de crítica, ¿pero como se puede tener tan poca vergüenza?, ¿y que institución puede justificar que mientras haya gente que apenas tiene con que vestirse -o directamente no tiene- estos señores nos obliguen a ver sus desnudos en escena?, ¿quién puede alegar que haya derecho a que mientras miles de personas lo están pasando mal, se permita a esta gente subirse a un escenario, que también mantenemos todos, a hacer lo que ellos llaman “arte”?, ¡esto es una burla!, ¡se están riendo de todos en nuestra cara con la mayor impudicia y el mayor descaro imaginable!, ¿pero como es posible que se permita esto?, ¡justicia!, ¡justicia que clama a los cielos!, ¡justicia!.
Y por cierto, últimamente cómo estoy con el tema de la retórica de alocución grandilocuente… si ya verás, me va a contratar Pablo Iglesias para sus discursos demagógicos… ¡mierda!, ya me he puesto también en contra a los de “Podemos” (ahora vendrán todos aquí como locos), si es que no gano para enemigos, entre las críticas al ayuntamiento, también a los del Opus y los neocatecumenales, y además los “artistos”… creo que debería de empezar a buscar aliados, ¡vaya por Dios!, que malo es no venderse a nadie, de verdad….
Pero bueno, vamos a dejar el tema que nos desconcentramos del asunto principal de este artículo. En fin, a pesar del acoso y derribo que se ha intentado contra Universo de A, próximamente reestableceré el que puedan hacerse comentarios sin registrarse, al fin y al cabo, no me cuesta nada borrar los que no merecen la pena, y como nunca los leerá nadie (ni yo mismo); y con el tiempo, prudentemente, volverán las habituales grandes y necesarias libertades a Universo de A, de nuevo se volverá a poder calificar libremente y comentar sin ningún tipo de restricción, aunque habrá que tener paciencia… ¡que aquí no viene ninguna Doncella de Orleans a liberarnos!.
Y vamos a mirar el lado positivo de todo este asunto: las visitas habituales y los seguidores de Universo de A han crecido muy exponencialmente, con lo cual, Universo de A ya tiene más voz; ya ves, jajaja, parece soy el “Variety” español, el lugar al que acuden profesionales y no profesionales del mundo del espectáculo… bueno, ahora ya puedo hacerme una idea de como se siente Pérez Hilton… aunque menuda pereza, como esto me obligue a dedicarle más tiempo al blog y mejorar la marcha en la escritura de artículos, debido a las espectativas de la gente, va a ser una pesadez, bueno, por suerte no llegaremos a tanto.
En cualquier caso, no nos equivoquemos, el tema de las Críticas express: Los justos / En el desierto, ha quedado absolutamente cerrado, como bien puse allí, no es para menos, ya que se portaron como niños, habrá que castigarlos como a tal. Cualquier comentario de todo aquel mínimamente sospechoso de relación con este tema será inmediatamente borrado sin remisión posible (o nunca saldrá a la luz), que jamás olviden que no son bien recibidos en este blog.
En definitiva, La irracionalidad, la incivilización y la intolerancia no serán nunca jamás pemitidas de nuevo en Universo de A, que esto quede definitivamente claro.
Y como últimamente estamos especialmente barrocos, simbólicos, metafóricos y altisonantes (sólo hay que ver las imágenes elegidas para los artículos), pues no podemos dejar pasar la ocasión de poner banda sonora para celebrar tan gran acontecimiento triunfal, y a falta de un catedral donde celebrar un “Te Deum” jajaja, lo haremos con el “Ven, ¡oh guerrero!” de la ópera “Aída”, nada menos: