La Asociación Argentina Amigos de la Astronomía invita a la comunidad a la conferencia titulada "El sistema astronómico de Aristóteles", a cargo del Licenciado Gerardo Botteri (UTN) y del Profesor Mgter. Roberto Casazza (UBA - UNR). La misma se realizará el viernes 3 de Diciembre de 2010, a las 20:15 hs, en nuestra sede social (Av. Patricias Argentinas 550).
El sistema astronómico de Aristóteles, compuesto por 55 esferas concéntricas, está basado en los sistemas astronómicos de Eudoxo (26 esferas) y Calipo (33 esferas), astrónomos del s. IV a.C. Todos estos sistemas procuran dar cuenta de los movimientos aparentes del cielo –lo cual logran en algunos casos con gran precisión, tal como se ilustrará mediante diversos cálculos comparativos–. El funcionamiento de tales sistemas supone la fijación de los ejes de las esferas internas con un cierto ángulo respecto de los ejes de las externas, al tiempo que todas las esferas rotan sobre sus respectivos ejes con velocidad regular, aunque en diferentes sentidos. Sólo algunas de estas esferas, las más interiores de cada grupo planetario de esferas, portan a los planetas fijos en su superficie.
Los geómetras-filósofos griegos lograron mediante tales modelos explicar (y calcular) los movimientos errantes de los planetas. Sin embargo, mientras los sistemas de Eudoxo y Calipo son eminentemente geométricos, ofreciendo una consideración cinemática del problema de los movimientos celestes, Aristóteles intenta una notable integración mecánica sui generis, que lo obliga a aumentar el número de esferas de sus predecesores insertando esferas antigiratorias para anular la superposición de ciertos movimientos presentes, a su juicio, en los sistemas de Eudoxo y Calipo.
La exposición presentará sucintamente los sistemas de estos tres pensadores, y dedicará especial atención a algunos aspectos de la física y la metafísica aristotélicas relevantes para la comprensión de la doctrina del Primer Motor Inmóvil, al que Aristóteles caracteriza como acto puro, considerándolo divino, eterno, inalterable e inmaterial. Este Primer Motor Inmóvil mueve como objeto de amor al primer cielo (la esfera de las estrellas fijas) eternamente, resultando así su perfecta actualidad la causa última de todos los movimientos supralunares y sublunares.
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Asociación Argentina Amigos de la Astronomía
Fuente: Asociación Argentina Amigos de la Astronomía.