Como saben, desde el Club Deportivo Más Vale Prevenir queremos abarcar diferentes ramas de la vida de un niño/a, y entre esas ramas se encuentra el darle a conocer de una manera lúdica nuestras tradiciones, nuestros valores, en definitiva, nuestra identidad canaria.
Durante esta primera semana de agosto los niños trabajaron con barro, realizaron disfraces para emular a los enanitos de La Palma e intentaron hacer su baile. En todas las actividades que realizamos, dejamos bien claro de dónde era cada tradición, y el respeto que hay que tener hacia la misma, dado que cada celebración es inimitable.
Respecto a la rama deportiva, tenemos que agradecer al CLUB DE BOLA CANARIA Y PETANCA EL MESÓN DE ARUCAS – AV SAN FERNANDO la colaboración desinteresada que ha tenido con nosotros y nuestros peques, y es que éstos disfrutaron de dos modalidades deportivas como LA PETANCA y LA BOLA CANARIA. Este club imparte sus clases en el barrio de San Fernando, enseñando tanto pequeños como a grandes.
La Rama, la Danza de Los Enanos, la Traída del Agua, fueron algunas de las fiestas populares que nuestros pequeños disfrutaron, y tanto que si disfrutaron, y es que el viernes, día en el que cerrábamos esta temática, bailaron, corrieron e hicieron lo que más les gusta, mojarse.
A parte, y de manera muy especial contamos con la colaboración de una cocinera, la cual, nos hizo una pella de gofio de plátano, dos productos típicos de nuestras islas, una vez hecha, tanto monitores como niños/as pudieron degustarla.
Cada actividad que planificamos y desarrollamos en nuestra escuela tiene una parte educativa y de concienciación.
En la Fiesta del Agua, hicimos entender, en la medida de lo posible, la importancia que tiene ésta y la necesidad que nosotros, los isleños tenemos de no malgastarla.
Como dice el dicho, una imagen vale más que mil palabras y en ellas podrán ver las diferentes actividades que desarrollamos durante la semana Canaria.
Desde el club, y dado a que las caras de los niños y niñas están difuminadas, les podemos garantizar que los rostros de los mismos, era de auténtica felicidad.