Pues aquí estamos dos días después para contaros nuestras impresiones sobre el último de los blancos que el pasado Mayo la Bodega Sel D´Aiz (ya me acostumbré a escribirlo) han puesto en el mercado (sin contar el Kalma).
Y una vez más me encuentro en la misma disyuntiva, aunque en el fondo me gusta poder hablar de vinos de amigos, pero me cuesta haceros llegar realmente los sentimientos. Por que un vino es mucho más que sepa a Tamarillo
Es un trabajo durante todo el año, con amor y sentimiento, sufrir para tratar lo menos posible al viñedo, incluso pidiendo en invierno al del pueblo las ovejas para que ayuden a cuidar, cortar la hierba y abonar esas vides tan geniales que tienen, Eso es utilizar la naturaleza como debe ser.
Fotografía del facebook de Bodegas Sel D´Aiz
Ya sabéis que esto es albariño y godello, yo casi que les empujo a que hagan todo godello o que cambien la albariño por treixadura, estoy convencido de mayor producción y más calidad. Reconozco que también les vuelvo loco con lo de la barrica, y más tiempo de lías. Pero eso me da que con el tiempo y más producción se llevará a efecto.
Tengo que confesar algo, todas las añadas de este vino que he probado, me han gustado, pero reconozco que, para mi, es el más normal de los tres, pero este 2014 es probablemente el mejor que han hecho, con una acidez alta pero que se irá integrando con el tiempo, graso en boca, con volumen, mucho más serio que otros años. Han elevado el listón al record de calidad por ahora.
Vino Blanco Yenda albariño-Godelo 2014, Suma y sigue, y este año aún más bueno, así que ya sabéis, os repito mi consejo, buscadle, hablad con ellos y empezar a haceros con algo para próximas vendimias, estamos casi ante un vino de cupo de Cantabria, y sino el tiempo.