Revista Cocina
Como decía ese de la radio: " Corría el año 2008..." poco más o menos, cuando nos regalaron dos botellas de este Alaia 2005. Las metimos en la despensa, ya ni en la cava y allí estuvieron hasta el pasado mes de Abril.
Decir que en aquella época este vino nos gustaba mucho, alguna que otra caja nos bebimos. Estaba alegre, divertido, un vinito sabroso y que entraba muy bien para picotear y en cenas informales, o en esas barbacoas de verano, fresquito y al gaznate, litros y litros.
Estaba elaborado por el desaparecido grupo Galiciano en Castilla y León y con este coupage de uvas: Prieto Picudo (50%), Tempranillo (35%), Merlot (15%), y un pequeño paso por barrica pero no mucho.
Pues eso, olvidado, y el otro día Minniky tenía que hacer un guiso de carne, y qué vino cojer, pues encontró este Alaia y dijo, pues venga este que seguro que no estará muy allá. Abrió la botella y..... me llamó al trabajo para decirme que estaba increíble, sorpresón, no es que estuviera vivo, estaba mucho mejor de lo que recordábamos, le quitó el aire y me lo guardó en la cava, cuando llegué a casa por la noche nos dimos un homenaje con las carrilleras de cerdo ibérico que preparó y este Alaia 2005 que estaba espectacular. Con toques más a cuero, café, torrefactos.
Bueno os podéis imaginar el sorpresón, pero lo mejor fue que guardamos el culín y dos días después todavía estaba bebible.
Alaia 2005 increíblemente bueno. Cuando ya debería estar muerto sigue luchando como gato panza arriba para sorprender y agradar.