Revista Cocina
El pasado Sábado 3 de Enero os contamos una pequeña aventura vinícola por bares, donde probamos varios vinos, este fue uno más de ellos. El primer post que os contamos fue cuando hablamos de Issué 2011, os dejo aquí el enlace aquí, y como apunte deciros que en cuatro días es de las entradas más visitadas de los últimos 30, se ve que ha tenido repercusión.
Muchos son los vinos que hemos tomado de Telmo, y como es normal unos nos gustan más que otros, y son varias de las entradas que tenemos pendientes de contaros, pues anda que no hace vinos este gran Rollíng Wine Maker.
Vino de productores de Lanciego, principalmente de tempranillo, y algo de garnacha y graciano, fermenta en depósitos de acero y de hormigón para luego pasar a fudres y barricas usadas de roble francés. Vino bastante rico, rojo picota muy cubierto, con aromas de fruta, pasas y algún toque ahumado, torrefacto y ligeros atisbos de cacao. Es fresco en boca y bebible, bueno, es más que bebible, nos triscamos dos botellas sin enterarnos, nos gustó, con la acidez franca, bien equilibrada. Rioja de corte moderno, quizá la única pega es que sabemos que es Rioja por la contraetiqueta, a ciegas no acertaríamos el origen, quizá algo de lo que se peca de vez en cuando, esa falta del Terroir. Pero aún así, una vez más este hombre demuestra saber manejar las uvas y el trabajo en bodega.
Tinto Corriente 2012 de Telmo, un vino más a pedir por las barras, porque su precio no es elevado, pagamos por las botellas 13€ cada una, con lo que es bastante buena relación. Esperamos lo probéis y nos deis vuestra opinión. Mientras seguiremos tomando vinos por esa zona, también acompañados. Pasamos una tarde noche realmente inolvidable, gracias a vosotros dos.