Visita a Graceland, la mansión de Elvis Presley

Graceland, la mansión de Elvis Presley, es el hogar más visitado de Estados Unidos después de la Casa Blanca ( cuando esta abierta al público ). Es un lugar como para morirse de risa por lo estrafalario de algunas de las cosas que se pueden ver, pero eso si, también la visita puede resultar intrigante, entretenida y, en muchas ocasiones, emotiva.

Desde aquel día de 1957 en que Elvis se trasladó a Graceland con su familia éste fue su escape y su refugio, un lugar donde poder relajarse en un ambiente que para él era su hogar, uno de los pocos sitios en los que se sentía realmente a gusto y en paz. Un lugar en el que poder dar rienda suelta a sus gustos estrafalarios, con sus lamparas de arañas de cristal, las tupidas alfombras de pelo largo, los espejos dorados, las vidrieras de colores o las llamativas cortinas de azúl eléctrico y doradas. El espíritu de uno de los personajes que más ha influido en la música y la cultura del siglo XX sigue presente en esta mansión que continuará siendo una parada obligatoria mientras los nostálgicos sigan viajando. Los tiempos han cambiado, pero no así Graceland, que se quedó congelada en 1977, el año en que Elvis fue enterrado en eljardín de la mansión.

Los mayores atractivos de la visita a Graceland son la famosa flota de Cadillac rosas de 1955 ( entre otros 21 vehículos ), las exposiciones de su llamativo vestuario, la increíble habitación de la Selva ( tan exagerada como se puede intuir en su nombre ) y la habitación dorada de 25 metros, abarrotada de discos y sencillos de oro y platino que representan mas de mil millones de discos vendidos en todo el mundo ( mas que cualquier otro cantante o grupo en la historia de la música grabada ). También se pueden ver múltiples artículos provenientes de sus conciertos o, por ejemplo, sus avionetas.

La visita puede realizarse con audioguias a zonas concretas o con guías por toda la casa e instalaciones. Los precios oscilan entre los 33 y los 70 dólares. Ver web oficial. Y como era de esperar la imagen del rey del rock a día de hoy esta totalmente mercantilizada, por lo que la mansión cuenta con su propia tienda de souvenirs.

Y para quienes quieran completar la estancia de la manera mas rockera qué mejor que alojarse en el hotel que esta frente a la mansión, el Heartbrake Hotel, centrado en la estrafalaria estética rockera de los años 50.