Vivir de noche (Live by night, Ben Affleck, 2016. EEUU)

Live by night (Ben Affleck, 2016. EEUU): buen relato de gangsters durante la época clásica, es decir, la de los años de la Ley Volstead y el contrabando de alcohol, a partir de una novela de Dennis Lehane, cuya obra ya ha conocido ejemplares adaptaciones al cine de parte de cineastas tan notables como Clint Eastwood (Mystic River), Martin Scorsese (Shutter island) o el mismo Ben Affleck con la estupenda Adiós, pequeña, adiós,escrito, mejor firmado y todavía más cuidado (tres aspectos en los que se alza con gran superioridad, una y otra vez, a su faceta como intérprete) por el propio Affleck en su cuarta realización. Desde la fría Boston a la tropical Florida, resuena una y otra vez, a nivel visual al menos (y también en alguna que otra parte de su temática) sobre El padrino, sobre todo su segunda parte, y su libreto se encarga de reflotar conflictos (los personajes de Elle Fanning- la mejor de todo el plantel- o Matthew Maher) que no tienen otro sentido que es el de entretener, lo cual consiguen con aplauso. En el debe, un único lastre: su estiradísimo epílogo, que se convierte en tres o incluso cuatro.