Dicen que quien ha probado un Volkswagen ya no renuncia nunca más a la marca. Por lo general, los jóvenes tienden a buscar motores potentes, buscan como locos esa sensación de adrenalina... La variante GTI y el apellido R les vuelve locos y es de lo que más solemos encontrarnos en las concentraciones... y si no es un GTI o R original, la mayoría tiende a darle un aspecto personalizado para que destaque igual o más.
Es bien cierto que es un modelo que enamora a cualquiera, pero con el paso de los años, por suerte o por desgracia, van llegando cambios a nuestra vida... Volkswagen nos demuestra con toda su gama que es capaz de adaptarse a la familia, amantes de la velocidad, deportistas, trabajadores, jubilados... Dicen que el niño que llevamos dentro nunca muere, por lo que siempre estaréis a tiempo de darle ese toque particular que os defina, ya sea con las configuraciones personalizadas que la propia marca ofrece o con vuestros propios recursos.
En el caso de la familia, si verdaderamente disfrutáis de los coches... ¿Vuestra pareja os pone impedimentos a la hora de cumplir vuestro objetivo? ¿o os apoya al 100%? Si vuestra respuesta es afirmativa, cuidad al máximo la relación! Él o ella estará ahí para daros su opinión y apoyaros... Nunca olvidéis esos momentos que pasáis juntos haciendo lo que más os gusta.
La historia de hoy nos llega desde Bogotá, una pareja llamada Elisabeth y James que decidió, 40 años más tarde, volver a vivir un viaje que les dejó marcados justo cuando comenzaban su relación, un viaje al que ellos mismos lo definen como increíble e inolvidable. ¿A quien no gustaría volver a sentir algo así por segunda vez?
Para llevar a cabo la travesía era imprescindible contar con un coche. Ahí es cuando el boca a boca y las redes sociales conectaron a la feliz pareja con Volkswagen, quien les facilitó un Volkswagen Gol para que la aventurera pareja recorriera Bogotá, Medellín, Lima, Cuzco, Iquique de nuevo. Toda la travesía está registrada en 7 episodios llamados Agolescentes, donde Elisabeth y James nos demuestran que la juventud es un estado del alma y que nada tiene que ver con la edad.
¿Y a ti? ¿Te gustaría volver a revivir un momento mágico de vuestra vida con vuestra pareja 40 años después?