Wag the Dog: los medios son el mensaje

                        Cuando se descubrió que la información era un negocio,                         la verdad dejó de ser importante                                                             Ryszard Kapuscinski Las cortinas de humo han existido tanto en la política como en los medios de comunicación, pero desde el momento en el que la televisión se hizo reina de los medios, esas cortinas de humo, han logrado deponer presidentes, convertir héroes en asesinos, invadir países en nombre del amor libre o justificar el papel de ineptos en el poder, y con este texto perfectamente podríamos estar describiendo  nuestro presente político - mundial-, sin embargo, estamos haciendo alusión al nombre en español de la película de  Barry Levinson  Wag the Dog (1997), por que este reconocido productor y guionista estadounidense, que siempre ha tenido en la sátira política y social su punto de inflexión, toma muchos de los eventos cruciales de ese momento, por ejemplo, el escándalo sexual de la Casa Blanca con Bill Clinton y su invasión "democrática" para tapar dicho escándalo, así como el papel de los medios, que en ese momento - y aún hoy-, logran justificar una guerra para mantener su  mejor imagen. Levinson , fiel a su estilo, y con un reparto de lujo, - con el que va a compartir varias películas- no sólo se burla de tales eventos sino que los lleva al paroxismo, tanto del papel de los medios como del mismo Hollywood, y su falsificación de la realidad. 
Los medios median el miedo Escrita por el reconocido dramaturgo David Mamet y por la productora y guionista Hilary Henkin, quienes adaptan libremente la novela American Hero de Barry Leinhart, que nos muestra ese cinismo, tan característico de la política exterior estadounidense, y su capacidad de llevar a los extremos y ficcionalizar la realidad como la tiranía, para mantener su buen nombre, eso sí, en clave de comedia negra.

Días antes de las nuevas elecciones presidenciales, un escándalo sexual recorre los pasillos de la casa blanca, las insinuaciones sexuales por parte del presidente a una adolescente, y jugándose su relección, hacen que todo su departamento de propaganda y medios, busquen la mejor forma de salir de dicho apuro, y lo mejor que se puede inventar es una guerra, contra un país desconocido e indiferente para los estadounidenses. Los entresijos propagandísticos, con su capacidad para el engaño, harán que el cuestionable presidente, siga punteando en las encuestas; pero como toda farsa tiene su consecuencia,  cada vez se hará más compleja la mentira, y a su vez, lo que se pretende obtener: poder, fama, estabilidad política.....las mentiras son el pan de cada política, o mejor, la cola del perro es más inteligente que el perro, como pasa en esta obra, donde la situaciones y actores, engañan al mundo.

La luz de las estrellasRobert Richardson, es uno de los grandes directores de fotografía de Hollywood, cercano a Scorssese, Oliver Stone y Tarantino, su trabajo se destaca por su adaptabilidad a las estéticas de los autores, tanto en su estructura naturalista como en el artificio de la obra; aunque en Wag the Dog no explota sus mejores recursos, hay secuencias y escenas muy particulares; donde la  artesanía y la técnica funcionan, igualmente esa idea se puede reproducir en el montaje y dirección de arte; porque el gran punto de desarrollo de ésta película está en sus actores: De Niro, Dustin Hoffman, Heche, H. Macy y otros más, que sacan lo mejor de lo peor, de la complejidad política de un país poderoso, en sus interpretaciones. Eso sí, Hoffman se vuelve un personaje icónico, la representación del productor hollywoodense que entiende la entelequias  del mundo del espectáculo pero totalmente ajeno a su papel en la sociedad; en ese punto, está mucho más  adaptado Conrad Brean (Robert de Niro), un spin doctor, de la política estadounidense y quien realmente, está detrás, como tantos otros, del poder de un presidente. 
Una cortina de …crítica  
Aunque no sea muy afín a este tipo de películas, la de Levinson es bastante interesante y divertida, su humor tan superlativo como inteligente, mezcla de forma efectiva el sit-com como la reflexión política, e igualmente, nos pone a pensar en la realidades sociopolíticas de está época, en las que lo idiotas están en el poder.   Zoom in:  Varias nominaciones y premios de la Academia, principalmente en su guion Montaje Paralelo:  Medios de comunicación - Política y cine