La abadía de Westmalle se encuentra en la localidad del mismo nombre en Bélgica. Se dice que su primer cerveza fue elaborada en el año 1794, pero recién en el año 1834 recibió la denominación de cerveza de abadía al elaborar una cerveza dulzona y de bajo alcohol.Sin embargo parece que los monjes buscaban algo que los llene un poco más y en el año 1856 comenzaron a fabricar una cerveza fuerte de color amarronada que años después pasaría a ser la primera cerveza de estilo Dubbel ("doble" en idioma holandés). Ya en el siglo XX, la cervecería fue remodelada y agrandada y para el año 1934 decidieron lanzar una cerveza más fuerte que la dubbel, esta vez era rubia de 9.5° y la llamarían Tripel. Que tal? Sin dudas este monasterio es el padre de gran parte de las cervezas de abadía que hoy podemos tomar y su Tripel podemos decir sin equivocarnos que es LA TRIPEL.
Pasando a la cerveza, pude encontrar que en su elaboración se utiliza azúcar y se le incorporan varios tipos de lúpulos: Styrian Golding, variedades alemanas y lúpulo Saaz.Al momento de servirla se la ve de color ambar y algo turbia. Forma una espuma blanca que se mantiene por un largo rato.En su aroma lo primero que se siente son tonos bien frutales y dulces. Llegué a sentir algo similar al aroma del pan.Al tomarla se la siente dulzona y muy frutada con notas como si fuera de banana y durazno. Muy cremosa y con un amargor intenso que se hace fuerte en el retrogusto y que balancea muy bien todo el dulzor de la primera impresión. En garganta se la siente caliente y algo picante.Una exquisitez que casi me hizo llorar cuando se me acabó el último trago y me dí cuenta que solo tenía esta botellita de apenas 330cc.
Si les gusta el estilo Tripel no se pueden morir sin tomar esta cerveza. Dios quiera que un importador se apiade y algún día la podamos conseguir por estas tierras.
Westmalle Tripel:
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Galápagos
Logia cervecera
I love Tripel
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