Ayer le cogi al toro por los cuernos y le di un repaso a la figura de Angron. Es una figura que llevaba un mes sin tocarla y es que el dorado de la figura me estaba produciendo dolores de cabeza. Lo cierto es que le toqué un poco lo dorados, pinté un poco los correajes y volví a la cabeza que despues de ver la foto que puse en el blog la última vez me pareció horrible. Después de una horita de trabajo este es el resultado.
Creo que de momento la voy a dejar así, mi vista no da para más y el oculista dice que aguante todavía un poco más para ponerme gafas. Con un poco de suerte esta tarde puedo continuarla un poco más... o ¿pasaré a seguir pintando el Land Speeder?.