Revista Cine
Director: Kieran Darcy-Smith
De Australia sale buen cine, más o menos por eso me puse a ver esta bazofia llamada "Wish you were here", creativo nombre que ha sido título de una obscena cantidad de musicales, orquestas, novelas, películas y canciones, y eso que ésta no es la última en titularse así, puesto que el 2013 salió otras más, dirigida por un tal James O'Brien, que dice ser "the great american road movie". Te creo. Como sea, el verdadero motivo que me empujó a ver esta cosa es el hecho de que actúan Joel Edgerton (que acá -en el blog, digo, no en la "película"- queremos mucho) y Antony Starr, duro protagonista de la serie "Banshee", y puede que porque en Wikipedia salía que era de misterio. Por alguna razón pensé que Edgerton había metido mano en el guión, y como el hombre sabe escribir buenas historias, me convencí. Una maldita lástima, una maldita pérdida de tiempo (y eso que dura eteeeeeeeeernos noventa minutos): Edgerton no tiene nada que ver con el guión. Eso lo explica casi todo.
Edgerton y su esposa van de vacaciones a Camboya junto a la hermana de la esposa y su novio, Starr. Lo pasan bien y no importa, da lo mismo, el punto es que Starr desaparece y la búsqueda provoca crisis en los otros tres sujetos.
"Wish you were here" es vergonzosamente fallida, ni siquiera se acerca a rozar lo que pretendía desarrollar con esta maldita estafa. Se supone que esta película no es tanto sobre el misterio de qué demonios pasó con Starr, más bien sobre un estudio de personajes y relaciones que se resienten tras un hecho traumático. El problema es que el guión está pésimamente escrito, hace agua por todos lados y, por donde se le mire, carece del más mínimo sentido. (A propósito, escriben el director y la que hace de esposa de Edgerton). Si quieres hacer un estudio de personajes y sus relaciones interpersonales, entonces, primero, construyes/escribes buenos personajes, no estos payasos protagonistas que llegan a dar vergüenza ajena, sin carisma ni personalidad ni entidad ni nada por el estilo, por el contrario, simples lugares comunes (la hermana sexy, la esposa serie e iracunda, el esposo... ¿qué demonios es el esposo?, y el novio "misterioso" -misterio es lo que menos hay en esta "película"-) estancados de inicio a fin. De esta forma, como el director quiere ahondar en los personajes, y como en realidad los personajes no existen y mucho menos sus impostados y superficiales conflictos, la acción, vacía y estúpida, se queda estática y los minutos se hacen eternos. Luego tenemos el relato, otro ejemplo de cómo escribir un guión como la mierda: para empezar, entre medio del desarrollo de personajes, se decide recurrir a lo más fácil posible con tal de revelar la gran incógnita: los flashbacks, que llegan sin ninguna lógica ni coherencia interna, y que nos muestran cualquier basura hasta que, sorpresa, nos revelan qué demonios le pasó al novio (uno de verdad no se veía venir tal movimiento narrativo), y justo cuando la crisis matrimonial está en su punto álgido, que es cerca del final, claro. Entonces uno se da cuenta de que los guionistas y luego el director no tiene ni puta idea de qué contar, de dónde poner la cámara ni nada por el estilo: probablemente ésta sea de las películas peores escritas, dirigidas y montadas que he visto en el último tiempo, y sobre el reparto ya me referiré en un parpadeo. Tercero, sabiendo que los personajes son mierda y que el relato es mierda, tenemos los hechos, que también son una mierda, tanto por lo poco original como por lo forzados e inanes que son, lo poco que atraen al espectador, lo poco que generan conflicto y demás, pero sobre todo por lo poco que pasa: no pasa nada, prácticamente. Primero viajan, luego pelean todos entre sí, luego se sienten mal y recuerdan la verdad, que nunca estuvo escondida (uno adivina el gran misterio a los cinco minutos, y no estoy mintiendo). El director claramente quiere hacerse el noir y el listo, pero su engendro carece de atmósfera, de tono, de tensión, de carga dramática, de unidad narrativa, de verosimilitud, etc. Además el tipo no sabe dirigir actores, prueba de ello es tener a un actorazo como Joel Edgerton, al que no sólo no lo aprovecha (como le pasa en la sosa "Black Mass") sino que además lo hace hacer el ridículo y sin ningún maldito fin. Antony Starr aparece en dos escenas y no hace mucho a decir verdad; Teresa Palmer primero sonríe porque lo pasa muy bien, luego pone cara de estrés porque lo pasa muy mal; y la otra, la que hace es esposa, también hace un soberano ridículo. "Wish you were here" es un inenarrable culebrón que merece ser expulsado de la vida y de la humanidad. ¿Dónde puedo postularla al premio Guinness por peor película? ¿Dónde puedo recuperar esos noventa minutos?