Aunque soy consciente de que llego con retraso, que hace días que se ha montado el revuelo en la red en torno a este trágico suceso, y haciéndome cargo de que algunos colegas blogueros ya han tratado el tema (véase el caso de Sonia Unleashed...), me veo en la obligación de hacerme eco del triste acontecimiento yofreceros el célebre video de Ramoncín DESTROZANDO el genial tema "Come As Your Are", de la mítica banda Nirvana.
Ramoncín y su cara de "que bien lo estoy haciendo"
Tal ha sido el ridículo de este personaje micrófono en mano, que hasta la revista musical Rolling Stone, en su versión española online, se hace eco de la tropelía musical perpetrada por este vividor que se cree músico y cantante. Veamos a continuación dicho titular y el vídeo de la trágica actuación:Realmente es algo espeluznante, una tremenda vejación musical, un insulto a la buena música y una falta de respeto total y absoluta a un artista de la gigantesca talla y valía como lo fue Kurt Cobain que, sinceramente, tiene que estar revolviéndose en su tumba, sufriendo convulsiones y arcadas a troche y moche. Ramoncín se equivoca en la letra, desafina, emite gruñidos y aullidos que no vienen a cuento, baila de forma ridícula y se vuelve a equivocar en la letra, inventándosela directamente, Todo esto en apenas tres minutos y medio de canción. Lamentable.
Kurt Cobain lamentándose por el atropello sufrido por parte de Ramoncín
Rey del Pollo Fritoe indigestola versión de PitingoSmell Like a Teen SpiritPero la cosa no acaba aquí, ya que por desgracia esta no es la primera vez que Ramoncín decide cargarse un clásico: ya lo hizo en su día echando a perder todo un himno como es "The River", de Bruce Springsteen. Así es, Ramoncín se atrevió con este temazo de The Boss y claro, pasó lo que tenía que pasar. Nuevo ridículo, en especial a la hora de tocar la armónica; el señor Springsteen rezumando dolor ante tal despropósito; y servidor, un fan incondicional del cantautor norteamericano de New Jersey, dolido en mi alma musical y golpeado en mi capacidad para digerir traumas. Las comparaciones son odiosas, pero es que cuando un tema es sagrado no debería ser mancillado jamás, y si uno decide acercarse a la leyenda y versionarla, debe hacerse con el mayor de los respetos y un cuidado extremo.
En esta ocasión, primero disfrutad de la versión original de Bruce Springsteen y luego poneos a cubierto con la versión del paladín de la SGAE. Permitidme que me ponga en pie para escuchar la que es sin duda una de las mejores canciones de la historia de la música.
Y ahora es cuando viene la abyecta versión de Ramoncín....
Sinceramente, por hoy creo que es suficiente. Pero, por desgracia, la cosa no termina aquí y muchas han sido las atrocidades que se han perpetrado en el mundo de la música al versionar, mutilar y destrozar grandes canciones hasta dejarlas reducidas a despojos sin personalidad, lejos de la idea original. Proximamente, más y peor...