El chef Fran López ofrece la cocina de su tierra en pequeño formato.
Xerta Tapas Bar, ubicado en el hotel Ohla Eixample, nos trae de la mano de Fran López los platos más tradicionales de les Terres de l’Ebre en un formato divertido, pensado para compartir y con el toque personal del chef premiado con Estrella Michelin. Un toque que nunca deja de lado la esencia de la receta original.
Cuando en el mismo hotel se abrió Xerta Restaurant enseguida encontró su sitio en Barcelona. Aunque hay que decir que su restaurante más gastronómico no siempre permite saborear todo lo que la cocina del sur de Tarragona nos puede ofrecer, y, ni mucho menos, hacerlo con la frecuencia que nos gustaría. Pero ahora, con Xerta Tapas Bar la cosa cambia y sí nos permite visitarlo mucho más a menudo e introducirnos en esta gastronomía local que para muchas personas aún resulta desconocida.
Tanto Fran como Joaquim López, chef y director de Villa Retiro Grup, respectivamente, son grandes embajadores de su tierra. Buscando nuevas fórmulas que den a conocer los productos del territorio, siguen contando con la anguila, una versión de la clotxa, ancas de rana fritas o el “suquet mariner” (en el que no faltan las galeras) como parte de su palmarés habitual.
Xerta Tapas Bar tiene acceso directo desde la calle Còrsega, como un restaurante más. Al ver su carta, y, pensando en tapas, encontraremos aquellas que nunca pueden faltar, como unas croquetas o incluso un canelón, que últimamente se posiciona más allá de un plato principal y se ofrece en tamaño mini o incluso en unidades. En este caso, el canelón será de pato salvaje. Quesos y ahumados, tartar de atún, boniato (otro producto que está en auge) o mejillones del Delta conviven con otras propuestas algo más desconocidas y, por supuesto, mucho menos habituales en cualquier bar de tapas como un trampantojo muy conseguido, los “churros con chocolate” de bacalao y salsa de marisco y tinta de calamar y el “xapadillo” de anguila con picada.
Los amantes del marisco encontrarán en Xerta Tapas Bar una variada oferta de crustáceos y bivalvos como cigalas, cangrejo azul, navajas y, cuando sea posible, “caixetes”
Para finalizar no encontramos una carta de postres, sino un carro para que cada uno pueda escoger qué es lo que más le apetece. Entre ellos se incluyen los “Pastissets del Delta” que traen directamente de un horno de leña de La Fatarella, el Forn de baix.
Para acompañar sus tapas y platillos, además de refrescos, aguas y cervezas, en Xerta Tapas Bar ponen a disposición del comensal los vinos de la carta de Xerta Restaurant, con más de 300 referencias. Si se opta por copas, su carta será dinámica, cambiándose cada 15-20 días.
Fran López comenta: “La idea es transportar la cocina del Delta a Barcelona en forma de tapas y platillos en un ambiente más desenfadado que en el Xerta Restaurant”.
Joaquim López, en cambio, hace hincapié en el espacio, “Su posición estratégica hace que el espacio sea visible desde todos los puntos, convirtiéndose en un lugar de encuentro tanto para huéspedes como para el público local.”
Sea por su localización o por su cocina, Xerta Tapas Bar da la oportunidad de comer de una forma informal algunos de los platos más tradicionales y sabrosos de las Terres de l’Ebre. Ya no hay excusa.
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