Regar o no regar, esa es la cuestión. Sobre el riego de la vid disertó ayer el Dr. D. Diego Intrigliolo en el marco de las XXXVI Jornadas de Viticultura y Enología Tierra de Barros en Almendralejo. Y parece ser que la cuestión no es tan sencilla: múltiples factores intervienen en la influencia del riego sobre la calidad de la uva, la poda, el aclareo, el tipo de suelo… Nada resulta simple ni casual en la obtención de un caldo de calidad.
Regar o no regar, esa es la cuestión. Parafraseo del Shakespeariano to be or not to be, that is the question. Ser o no ser un Centro Universitario, como el riego de la vid, no es cuestión sencilla porque se puede ser o se puede ser y, además, con excelencia. Y así es el Centro Universitario Santa Ana: no se limita a ser, no se limita a su labor docente; se implica en su tierra y fruto de esa implicación son la Jornadas de Enología y Viticultura Tierra de Barros. Un congreso sobre el vino en todas sus facetas: agronómica, química, industrial, microbiológica en incluso social y humanística. Por estas jornadas, jóvenes en su espíritu y maduras en su edad, han pasado los más sobresalientes investigadores de la vid y el vino de todo el Estado y algunos de más allá de nuestras fronteras. Sus trabajos se recogen año tras año en cuidadas ediciones que constituyen un valioso fondo documental y científico.
Puede reconocerse o no, pero el sector vitivinícola extremeño sería probablemente distinto sin la existencia de estas Jornadas. En ellas se comenzó a hablar de Denominación de Origen, en ellas se divulgaban conocimientos técnicos de los que tan necesitado estaba el sector en aquellas fechas de su reconversión hacia la calidad.
D. Mariano Fernández-Daza, primero y su hija Dña. Carmen, actualmente, decidieron que el Centro Universitario Santa Ana, contra viento y marea, con o sin ayudas, con o sin el merecido reconocimiento, organizaría y seguiría organizando estas Jornadas. Que sigan muchos años.