Y es que la ciencia avanza que es una barbaridad

Se está celebrando el Mobile World Congress en Barcelona, el MWC para los entendidos, y he comentado nada al respecto. Con lo importante que es este evento para el sector del taxi, restauración y señoritas de compañía. Son cuatro días intensos en el que el comercio de la ciudad sumergida en un ritmo frenético y el dinero fluye sin límites de unos bolsillos a otros dejando una riqueza que daría envidia al Plan Marshall. Ah, y también dicen que es importante por no se qué de la tecnología y de unos cachivaches que sirven para hablar.

Dejando de lado mi particular forma de ver la realidad, es que no he leído nada que me llame la atención. Hubo un tiempo en que si era un lugar donde aparecían las novedades que podían cambiar como nos relacionábamos con el mundo, pero ahora hay una gran sequía de ideas innovadoras. Tenemos wereables, algo que conocemos y que sigo sin ver la aportación diferencia para una mayoría de público, tenemos cargadores sin cables, que también era conocido anteriormente, y por lo que he leído sobre la presentación del presidente de Facebook, para este viaje realmente no hacían falta alforjas: Llevar internet a África.

No es por llevarle la contraria, y estoy a favor de que sea un servicio al alcance de todos pero creo que antes de poder conectarse a Facebook y usar Google, que es lo que en el fondo quieran estas empresas. Habría que empezar por estabilizar la región, crear riqueza, hospitales, evitar las hambrunas, las epidemias, y todas esas pequeñas cosas que nos permiten holgazanear en internet porque no tenemos que preocuparnos por ellas.

Pero todo esto no quiere decir que la creatividad haya desparecido, estoy convencido que hay proyectos e ideas locas que pueden provocar dos tipos de reacciones: risas sin ningún tipo de reparo -el caso de Airpnp- o bien crear una industria en un sector totalmente nuevo. Y no es una cuestión de ser optimista, es una mera percepción estadística, con tantos millones y millones de personas sobre la faz de la tierra, con que sólo el cero coma cinco por ciento tenga una idea que pueda ser brillante, que consiga llevarla del papel a la realidad y que consiga financiación, salen muchas ideas que nos pueden dejar con la boca abierta el mismo modo que el primer ordenador personal.

Por eso hay que llevar, no tanto la tecnología, sino la información y el espíritu para detectar en que podemos mejorar. Con estas dos variables no hay la menor duda que el futuro seguirá siendo nuestro, pero si nos olvidamos de educar y de pensar de una forma crítica, probablemente nos veamos abocados a ver reposiciones de glorias pasadas que solo sirven a la ciudad para recaudar impuestos, y a los directivos tomarse cuatro días de vacaciones.

Película: The Gods Must Be Crazy

Jose Salgado

Co Founder at HubLawyerCon formación en psicología y con un Máster en dirección de empresas, la curiosidad y las ganas de aprender han sido el motor de mi carrera profesional. Por este motivo he participado en proyectos de todo ámbito, ISPs, Comercio electrónico, Plataformas de e-learning, Comunidades de prática y Redes sociales profesionales. Todo este historial profesional me ha llevado a tener una visión global de la empresa y una perspectiva orientada a negocio, donde el cliente se situa en el centro de todas las operaciones de marketing, ventas, tecnología y de gestión de recursos humanos.