Nuestro augusto y amado presidente (pongan voz de locutor norcoreano) se dignará mañana a materializarse entre los mortales y comparecerá en las cortes para explicarnos “noseque” porque, en serio, no creo que nadie crea que lo del señor Bárcenas tenga una explicación distinta de la que ya suponemos todos, aunque a esta gente se la trae al pairo todo lo que pensemos. Más bien creo que, en el fondo, estamos esperando ver por donde nos saldrá esta vez el señor plasma porque explicarnos lo que debería casi seguro que no lo hará y dimitir por la indecente cantidad de infamias y barbaridades perpetradas por él mismo, sus ministros y los diputados de su partido, pues va a ser que tampoco lo veremos con nuestros ojos. No hace falta buscar a la Pitonisa Lola para saber que nos van timar de nuevo, de hecho en el orden del día del pleno de la comparecencia han colado la aprobación de algún Real Decreto para así darnos, una vez más, otra ración de “normalidad” como si de bravas en un bar se tratase.
El hecho va más allá de una reunión de tupperware en el congreso, es más grave. Para empezar, si el contable tiene razón, este gobierno no sería legítimo ya que el partido que ganó últimas votaciones puede que hubiese cometido, entre otros muchos delitos, fraude electoral al financiarse ilegalmente, digo yo, así como quién no quiere la cosa. Lo que está claro es que con o sin Bárcenas los abusones nos están transformando en República Bananera, porque a esto que vivimos no se le puede llamar ya democracia. Con su bien orquestado Austericidio nos han mutilado los derechos laborales más elementales, nos han arrebatado la sanidad hasta casi el nivel del curandero de la tribu, de hecho los demógrafos alucinan con el descenso de la esperanza de vida, han desvirtuado tanto la justicia que el presidente del TC es un militante y asesor suyo (por supuesto que por pensar eso también dicen que soy terrorista), pretenden que nuestros hijos no vayan al cole en condiciones y hasta se han metido en quién puede o no ser madre , vamos, ni en Pionyang llegan a tanto. Todo por el bien de una engañosa recuperación económica a costa nuestra que resulta tan claramente beneficiosa para los amigotes como que el gobierno ya da por perdidos más de 37 millones de euros (menudo regalo) de aquellos que entregó al mal llamado“rescate bancario” y eso que prometió que los paria no lo notaríamos, pero el caso es que nos ha hundido en la miseria.
Ya sólo le faltaba para demostrarnos su desmesurado desprecio hacia nosotros al comparecer un primero de Agosto, con todo el calor y a sabiendas que estamos aletargados porque el sol nos reblandece el cerebro (a mí por lo menos). Y eso, gracias a una carambola del destino en la que entraCiprian Baltoiu, elperiodista rumano que nos hizo un favor enorme al formular una bien traida pregunta a nuestro hierático mandatario. Porque si no, ¡ni en broma comparecía este!.
Nos ignora, se siente por encima del bien y del mal. Insulta a los que confiaron en él para el gobierno, aquellos que han visto ahora como su programa no era más que una sarta de mentiras vacías y que ahora comprueban que gobierno, partido y hasta su alma están podridos por la sombra de la corrupción y el trinque financiero. Este triste y desacreditado personaje comparecerá mañana, nosotros demostraremos ser mucho más decentes que él escuchándolo, nos contará un cuento tártaro y volverá a la cueva lúgubre para seguir perpetrando fechorías a la sombra de su mayoría absoluta. ¿Estamos dispuestos a aguantarlo una vez más?.
Hemos regalado casi 37.000 millones a los bancos en tres años ¿Sabéis?, por Rosa María Artal
Un periodista rumano le pregunta a Rajoy por Bárcenas