22 de mayo de 2015
"Buenos días cooliflower. Plantarse necesita tu ayuda. ¿Sabías que hay un país que se está por hundir a causa del cambio climático?". ¿Cómo?
Este mensaje figuraba entre mensajes privados de "Consigue followers gratis" y "Gracias por seguirnos". Qué rotundidad, ¿un país se hunde, además de este? ¡Vaya, nos vamos al garete de la mano, compañeros sin destino!
O no, que nuestro hundimiento es una metáfora político/social y siempre se puede volver a reflotar; para Tuvalu, en cambio, es un hecho cerca de consumarse. Desaparece, como un pequeño castillo de arena barrido por las olas, con su máxima altura de cinco metros sobre el nivel del mar. Desaparece como lo harán todas las pequeñas islas de orografía llana; después llegarán otras costas más a mano. Si el cambio climático no se detiene, algún día Sevilla celebrará la Feria de Abril al ritmo de las medusas. Olé.
Primero le toca a Tuvalu, que es mucho más que un territorio allá por el océano Pacífico; es el país más pobre del mundo, nueve atolones en los que te sales del mapa a poco que camines. Es una lengua y una cultura propias que serán pequeños cementerios marinos de recuerdos, el patio de recreo de escualos, un parque temático para tortugas.
La gran noticia es que algo se puede hacer. Nos hemos enterado de que Tuvalu existe poco antes de que deje de existir, pero gracias al azar lo salvaremos. Cosas del marketing: La empresa Lg quiso registrar un dominio terminado en ".tv" y descubrió que pertenecía a Tuvalu; se preguntaron "¿qué es esto?" y una cosa llevo a la otra... Nuestros hermanos argentinos de Plantarse se unieron a Lg en esta cruzada y ahora nosotros os pedimos que os enroléis para salvar un sitio tan hermoso, como poco conocido.
Firma la petición aquí, o aquí.
Qué casualidad, cooliflowerenses, que justo hoy, el Día Internacional de la Biodiversidad Biológica os pidamos salvar a un pueblo. Los pueblos, si no se cuidan, también se extinguen.