Si hay algo en lo que todos estamos de acuerdo al hablar de "Weeds" es que es de las pocas series capaces de reinventarse con cada nueva temporada. Y en su séptimo año, y tras lo ocurrido en la season finale de su sexta temporada, todos pensábamos que Nancy habría aprendido la lección. Nada más lejos de la realidad: la cabeza del clan Botwin ha vuelto a sus orígenes, y aunque ha cambiado de escenario, su situación ha sido la misma. Cuidadín, toca hacer repaso de la temporada y comentar su final. Si no la llevas al día, es mejor que no sigas leyendo.
La temporada comenzó con Nancy en prisión, tres años después de entregarse a la Policía como la asesina de Pilar Zuazo. Allí conoció a Zoya, con la que mantuvo un amor entre rejas. Nancy salió de la cárcel antes de lo previsto y puso en marcha un nuevo plan. En Nueva York, alejada de sus hijos, de su cuñando y de Doug (todos ellos en Dinamarca) iba a empezar una nueva vida, aunque en el centro en el que tenía que vivir no le iban a poner fácil las cosas. Después de conseguir la llave a su nuevo futuro en una sauna, Nancy se encontró con una maleta llena de explosivos. Y aunque conoció a Dimitri, su nuevo compañero de cama, la mayor preocupación de Nancy era recuperar a su hijo Stevie, al que su hermana Jill estaba criando como propio. En la búsqueda de un nuevo trabajo, Nancy llevó los atuendos más particulaes y volvió a demostrar por qué es tan grande cuando le toca hacer pis en directo. La batalla por la custodia de Stevie no había hecho mas que empezar, a la vez que Silas se presentó como el nuevo socio de su madre.
¡Qué viva la ropa de Nance!
Conocimos a las sobrinas de Nancy en esas conversaciones de Skype en las que intentaba recuperar a su hijo. Andy comenzó una relación poliamorosa mientras Nancy se ponía a gritar reclamando a su hijo, para terminar contactando con una "amiga" de su pasado: Heylia (me encantó ese momento reencuentro). Pero Heylia no estaba sola; otro amigo del pasado estaba con ella: Dean, el ex-marido de Celia (aiss, Celia). Con Nancy y Heylia dispuestas a hacer planes juntas, Nancy se reencontró furtivamente en el Planetario con Stevie. Nancy había conseguido un trabajo en la empresa de Doug (toda la trama de Doug ha sido lo peor de la temporada, sin duda alguna), lo que le llevó a conseguir nuevos contactos, liarse con el jefazo, y sacar a pasear su dedito. Pero el caos volvió a su vida en forma de "Hello, lover!". Ese grandísimo capítulo 8 nos regaló uno de los mejores episodios de la serie, con esa reunión imprevista en el loft. Poco después Shane era detenido por el Policía con el que había comenzado a trabajar y a Silas se la había metido doblada su nueva amiguita especial (Michelle Trachtenberg, que puso del revés, literalmente, el nuevo negocio). Y Andy se volvió loco y sacó su pistola de clavos.El nuevo negocio de Nancy, en forma de cajitas "deluxe" iba viento en popa, todo lo contrario a su relación con su hijo Silas, con el que parecían haber llegado a un punto de no retorno. Y nos plantamos en la season finale con Jill en Nueva York dispuesta a conseguir la custodia total de Stevie, cortesía de las ansias de venganza de Silas. Con Nancy buscando piso para comenzar una nueva vida junto a Stevie. Y con Emma avisando al poli amigo de Shane que la auténtica drug dealer era Nancy Botwin.
El reencuentro entre Jill y Nancy ha dado para mucho: han estado a punto de ser violadas por los amigos especiales de Dimitri. Han tenido un viaje en metro la mar de entretenido (la conversación del viaje de vuelta ha sido enorme). Y han sido apuntadas por una pistola. Silas ha pedido perdón a su madre, y han terminado reconciliándose. Y Shane se ha ofrecido como sarificio a cambio de evitar que su madre volviera a prisión (he pensado que terminaría confesando que mató a Pilar Zuazo): ha entrado en la Academia de Policía, algo que es completamente ignorado por su familia. Al final, parece que Nancy se ha alejado del negocio, ha comenzado una nueva vida junto a la familia de su hermana y la suya propia, pero sí le ha regalado a Silas su "crea tu propia maría". Pero si por algo será recordada esta season finale es por su última escena: Nancy siendo el objetivo de un francotirador. Y un disparo. Y pantallazo negro.
¿Estamos ante el final de la séptima temporada o ante el final de la serie? Showtime aún no se ha pronunciado al respecto, por lo que el futuro de la serie está en el aire. Pero hay que admitir que como final de serie da el pego totalmente. Pero soy partidario de una octava y última temporada de "Weeds", que me niego a despedir a dos de mis series favoritas en el mismo año.