Encontrar una información de Investigación y Ciencia en la prensa local ya es noticia, pero si encima es sobre micorrizas, ¡estamos de enhorabuena! Así que no podía dejar pasar la ocasión de transcribirla. Para el que no sepa lo que es una micorriza y para qué sirve, pasaros por aquí que está todo muy bien explicadito ;-)Antonio Ramos está a punto de cumplir 60 años. Toda su vida se ha dedicado a la agricultura. Una tradición familiar que se inició hace tres generaciones y que se ha centrado, principalmente, en el cultivo del chopo en la Vega de Granada. Antonio es un hombre inquieto, preocupado por la tierra, por su conservación y por el futuro de esta actividad profesional. Llevado por esta preocupación y por la necesidad de reaccionar ante la situación tan crítica que viene atravesando el campo desde hace tiempo, se propuso buscar alternativas para sus cultivos centrados en la producción de chopos. Empezó a investigar y a interesarse por lo que se hacía en otros países europeos y encontró una posible alternativa: destinar parte de sus plantaciones de chopo a la producción de biomasa, sistema alternativo de combustible no contaminante.
A la izquierda, Antonio Ramos muestra algunos ejemplares de chopos microrrizados
al investigador y al gerente de la empresa polaca Mykoflor, en su finca de Santa Fe. Fte: IDEAL
Su interés por este campo le ha llevado a participar en varios proyectos de investigación europeos que han tenido como escenario sus tierras situadas en el municipio de Santa Fe. "Me gusta investigar otras cosas. He visto cómo mis antepasados trabajaban con animales para transportar la madera, luego vino el tractor y después la motosierra... Hay que evolucionar", defiende este agricultor granadino.
Ha viajado a Polonia, Irlanda, Bélgica, Italia, Suecia y por toda España asistiendo a congresos y visitando fincas con la intención de saberlo todo sobre la producción de biomasa, práctica desconocida hasta hace una década en la agricultura española. "No contaminar", esa es su máxima. "El labrador, por norma, es el primero que tiene que estar con el medio ambiente y tiene que defender lo suyo", afirma convencido.
Su carácter innovador le ha llevado a ser pionero, en Granada, en la utilización de nuevos métodos que se están investigando para acelerar y mejorar la calidad y cantidad de la producción de chopos, como el uso de biofertilizantes o la inoculación con micorrizas que permite reducir el riego en este tipo de plantaciones. Desde 2007, Antonio Ramos, colabora con un grupo de expertos polacos en la investigación y producción comercial de este tipo de hongos. Para ello no ha dudado en micorrizar dos hectáreas de su finca con hongos procedentes de la empresa polaca Mykoflor, especializada en la producción comercial de micorrizas para diversos cultivos como el chopo, la vid o el olivo.
Extensión de las raíces cuando la planta está
micorrizada. De hecho, se dice que la planta
no tiene raíces, sino micorrizas.
Igual de satisfecho se ha mostrado Wlodzimierz Szalanski durante su visita a tierras granadinas. "Estoy impresionado por los resultados", explica rodeado de chopos. La comercialización de las micorrizas es para este empresario polaco "un buen negocio", pero con un objetivo medioambiental claro, "sobretodo tiene que servir a la sociedad. Si hay muchos bosques todo el mundo está contento y esto repercute en el cambio climático".
Comparación de abetos micorrizados (izquierda) y
no micorrizados (derecha). Foto de E. Barniskis
Antes de inocular sus cultivos, Antonio Ramos regaba sus tierras cada 20 días, entre ocho y nueve riegos, a "manta", es decir, inundando toda la finca. "El consumo de agua es de entre 8 y 12.000 metros cúbicos, dependiendo si la finca está nivelada o no. Del total del coste que tiene una alameda tradicional, el 40-45% se lo lleva el riego. Esto antes de podía asumir, hoy no". Su apuesta por el uso de micorrizas es clara, "ampliaré la inoculación" Este es un coste que ya tengo previsto -el precio de inocular una hectárea de chopos es de 1.000 €- cuando ponga más alamedas, sean para lo que sean, bien para madera o para biomasa, yo micorrizo". Para Antonio el éxito de esta iniciativa experimental con el chopo no es mérito solo de las micorrizas sino de la calidad y fertilidad de las tierras de la Vega de Granada.
Fuente: IDEAL
NOTA PERSONAL: Aunque es algo que ya está sobradamente demostrado (y hemos publicado diversos artículos al respecto), hace más de 6 años demostramos que la utilización de micorrizas mejoraba el estado hídrico de las plantas en condiciones de sequía, (el aumento de la producción de biomasa de parte aérea, el potencial hídrico mayor y la disminución de daño oxidativo). Este estudio fue publicado en Journal of Experimental Botany (12/187 Plant Sciences y un IF: 4.81)
Porcel R, Ruiz-Lozano, JM. J. Exp. Bot (2004) 55 (403): 1743-1750