JR Mora
Francisco González, presidente del BBVA, comentó a principios de semana que la reforma laboral planteada por el Gobierno era “insuficiente” aunque esta vez asumió algo de responsabilidad: “el sector financiero contribuyó a alimentar la burbuja inmobiliaria mediante la concesión de crédito”. Menos mal que lo ha dicho él, sino es que no nos hubiéramos dado ni cuenta. ¿Quién hubiera pensado esta barbaridad? ¿Qué los bancos contribuyeron a la crisis? ¿Qué los bancos han arruinado la vida de miles de familias? Qué cosas…
Por otro lado, el ‘sindicalista’ y actual ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, culpó a los excesos del sistema financiero del “elevado nivel de desempleo en España” y obviamente sus colegas de CCOO y UGT están totalmente de acuerdo con él. Otro ‘espabilao’ que se ha dado cuenta, también, ahora. Gracias ministro por abrirnos los ojos. Total que el Gobierno al que usted pertenece financió los excesos de ese sistema financiero. Insisto. Gracias.
Pero ahí no queda la cosa. Llega la vicepresidenta económica, Elena Salgado, que culpa del paro al exceso de crédito que favoreció la creación de una burbuja inmobiliaria, pero “no a los bancos como sujetos individuales”. Esto es lo mismo que echarle la culpa al ‘humo negro’ de Lost. Vamos, que por no hacer enfadar a sus amiguetes le echa el marrón a algo intangible… porque el exceso de crédito llegó al sistema por arte de magia. No sé si me da vergüenza o asco.
Total, que así sigue la cosa. El tema es que no hay consenso respecto a la culpa de esta situación tan deprimente por la que pasa el país. Que si la culpa la tienen los bancos, que si el crédito o que si la falta de flexibilidad del gobierno en su reforma laboral. Lo que sí podemos tener claro la ciudadanía es que la culpa no es nuestra pero que lo estamos pagando a base de bien.