Yo Tarzán Tú Jane

El ser humano desciende del mono. Al menos eso se me quedó de la clase de ciencias naturales donde nos explicaban sobre los ecus, opus, idus y demás terminaciones antropológicas del estudio de la evolución humana. Pues sí, somos animales decía la Miss.

Cuando hablamos de hombres y mujeres la mayoría parafrasea que “Los hombres son de marte y las mujeres de venus” quizá es su manera de decir que al venir de distintos planetas pues ni como entendernos y sin entrar en discusión, creo que tan nos entendemos y estamos destinados a, que nos pasamos todo el tiempo buscando a esa otra mitad para pasar el resto de nuestras vidas ¿o no?

Pero si de entender a los hombres se trata, me quedo con la versión de Defendiendo al Cavernícola de Rob Becker la cual, de una manera sencilla directa y sin tapujos nos muestra el origen de esos malditos malentendidos en las relaciones de pareja.

El hombre es un cavernícola dice Becker y como buen cavernícola se dedica a cazar, a proteger y a proveer. La mujer es recolectora al mismo tiempo que cuida a los críos y protege de que ningún animal se acerque a la cueva mientras su cavernícola anda fuera. Cuando escuche ese monólogo, entendí cuando dicen que los hombres sólo pueden hacer una cosa a la vez (cazadores) y las mujeres somos multitask (recolectoras).

En una de tantas despedidas de solteras a las que he asistido (tengo muchas primas recuerdan) las invitadas pasaban al frente y decían lo que para ellas era EL SECRETO de su relación. Los consejos iban y venían y el público enloqueció cuando un par de invitadas bastante mayorcitas comenzaron a decir que eso de la liberación de la mujer estaba sobrevalorada y que el éxito de sus casi 50 años de matrimonio era nunca haberle quitado el lugar a su marido. Tú, mujer, decía, tienes que trabajar y desarrollarte profesionalmente, ganar tus centavos, ser exitosa pero óyeme bien, jamás jamás JAMÁS debes mirar para abajo a tu pareja. No lo hagas menos. Dale su lugar y respétalo. Recuerda que él, es el fuerte, el poderoso, el cazador, el que provee. Y aunque los dos ganen lo mismo o incluso hasta cuando tu ganes más nunca le debes quitar el poder no le cortes los huevos hija es tu macho, es tu hombre. ¡WOW! Debo confesar que en el momento en el que escuché eso, atravesaba una situación complicada con mi pareja y en parte era porque quizá estaba haciendo exactamente lo que la viejita decía que no hiciera así que sus palabras me calaron hondo.

A los pocos meses de ese evento, asistí a una comida de cumpleaños. El festejado un cavernícola de unos cincuenta y tantos años y su mujer una feminista declarada. Me sorprendió que la mujer no moviera un dedo en toda la tarde, no nos ofreció ni siquiera algo de tomar. Sólo levantaba la mano y con una melódica voz le decía a su cavernícola (el festejado) que atendiera a los invitados bajo la excusa de es que no se ni donde está la cocina, como yo trabajo. La noche llegó y los anfitriones nos invitaron al salón de su casa ya éramos pocos y el frío comenzaba a apretar. Al entrar a la casa, un par de cavernícolas me cedieron el paso a lo que amablemente respondí gracias y justo al mismo tiempo una de las tantas feministas declaradas que había en ese momento respingó enseguida y dijo no necesito que me cedas el paso que no ves que somos iguales. ¡PFFF!

No estoy segura de quien está bien y quien está mal la verdad me quedo con las palabras de mi abuela que en su lecho de muerte dijo puedo estar satisfecha con mi vida. Mis hijas son verdaderas mujeres, exitosas profesionalmente, buenas esposas y excelentes madres.

Feministas no se me ofendan pero una Wonder Women no sólo es CEO y mamá, también es esposa. Acuérdate que le dijiste SI ACEPTO al príncipe no a los herederos. Así que no se te olvide que tu pareja no sólo es ese proveedor de semen que te hizo madre y atenderlo, no te hace menos mujer.

Quizá si ponemos más atención habría menos infidelidades (ambos lados por igual). Dicen que la mujer pone el cuerno por despecho pero si revisas un poco al amante te das cuenta que no es más que otro cavernícola que aún no le cortan los huevos. Y por el otro lado, el hombre busca a quien proteger.

Como el chiste que tantas y tantas veces he visto circular por internet. Chica conoce a chico, chica le dice que tipo de ropa, accesorios y peinado debe usar y al término de mes le dice tenemos que hablar, lo nuestro se ha acabado. Él sorprendido pregunta ¿por qué? a lo que ella responde, es que has cambiado. WTF pero si la que lo cambió fue ella. En fin.