Revista Viajes

Yoga entre glaciares y volcanes.

Por Ciudadesypueblos.net @revistacyp
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Escapar del estrés, tómarse un descanso y disfrutar de la naturaleza islandesa mientras practicas yoga es un modo perfeto de recobrar energías.

El yoga, una disciplina cada vez más extendida gracias a los infinitos beneficios que aporta, te permite conectar cuerpo y mente al mismo tiempo. Y entre los volcanes y glaciares islandeses encontrarás el lugar perfecto para relajarte practicando esta disciplina en plena naturaleza.

Skaftafell National Park, South Iceland.

Skaftafell National Park, South Iceland.

Llena de lagos, glaciares, fiordos y ríos, este país te ofrece numeroso enclaves únicos para desconectar y encontrar el equilibrio y la concentración que necesitas. Elige entre estos cinco lugares que te recomendamos:

Una de las visitas naturales obligadas es el Parque Nacional Thingvellir, el más conocido de Islandia por su historia. A escasos kilómetros de la capital del país, este parque tiene una enorme llanura rodeada de montes que alcanzan los mil metros de altura. Es el sitio perfecto para realizar la postura del loto, la más clásica del yoga donde trabajas la meditación y la concentración.

Cascada de Svartifoss en el Parque Nacional de Skaftafell (Islandia)

Cascada de Svartifoss en el Parque Nacional de Skaftafell (Islandia)

En el Parque Nacional Skaftafell, entre sus riachuelos y la cascada Svartifoss, encontrarás un lugar para realizar tus ejercicios de yoga preferidos. En la región de Austurland, al sudeste de Islandia, este parque es un entorno único donde encontrarse a uno mismo.

Un lugar casi desconocido de Islandia, la Isla de Heimaey, tiene unos paisajes sorprendentes para disfrutarlos realizando tus ejercicios de yoga. Una vez llegues en ferry, ¡disfruta de las reliquias verdes que ofrece!

Desconecta y medita en la playa de Vík. Es conocido por su arena volcánica negra y los Reynisdrangur, tres rocas gigantes que parecen “trolls” con un halo de misterio y con numerosas leyendas a su alrededor. Un lugar con mucho encanto perfecto para relajarse.

Pese a tener un nombre difícil o casi imposible de pronunciar, Kirkjubaejarklaustur, es un pueblo que merece la pena visitar ya que está cerca de diversas zonas de interés, zonas verdes, cráteres y volcanes, glaciares y desfiladeros. Lugares diferentes y tranquilos para meditar y conocerse a uno mismo.

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