por
Juan B Lorenzo de Membiela
No se tuvo otra opción que realizar una medición oficial por un ingeniero industrial experto en riesgos laborales.
45 decibelios fue el resultado.
Es el sonido que se alcanza en un salón de cualquier domicilio con la TV apagada.
Ese es su ambiente de trabajo. Ese es su sonido en su puesto de trabajo.
¿Y entonces ?
No era sonido objetivo sino subjetivo.
¿Y entonces?No era un problema mio sino suyo pero lo hizo mio para su mundo.
Luego vinieron los escritos.Enviados a múltiples instancias con hechos falsos e inexactos. Estrictamente hablando constituyen ilícitos penales. ¿Puede el odio romper la frontera entre lo legal o ilegal?
Asesorado por los « Franciscos », el uno en activo y el otro jubilado. El uno funcionario y el otro aparcero que gusta del mundo taurino.Hubo un tiempo en que los « Franciscos» enviaban correos electrónicos a senadores no importa el partido , esgrimiendo sus opiniones sobre gestiones directivas.. .Aquella tarde que saltaron las alarmas contra incendios por el humo del purito canario. Nada importó a la superioridad entonces y nada debe importar ahora.
PD ¿Cómo un funcionario de una entidad sabe tanto de otra distinta?...