...Anda que no estabamos esperando esta frase todos los años cuando, como si de la final de la Champions se tratase, toda la familia nos reuniamos en los ochenta, bandera de España en mano, para asistir al mayor concurso patriótico de Europa.
No sé si era por que sólo había dos canales (cantaba Sabina: "Telespañolito que ves la tele, te guarde Dios, uno de los dos canales ha de helarte el corazón"), porque la calidad musical y de espectáculo era muy grande o porque eramos más inocentes que un fuelle, el caso, es que nadie me podrá negar que la noche de Eurovisión reunía a tanta gente en las pantallas como el día de las uvas por nochevieja.
Nuestra espinita en los ochenta, cuando nuestro espíritu nacional estaba herido en su pundonor por este concurso, era que desde Masiel con aquel Lalala ningún español había estado en lo más alto de la tabla de votaciones ...había que ganar!.
El esquema del programa era el mismo...lo primero la conexión con señal intenacional y el himno de Eurovisión...(Para los que no lo sepan es el Te Deum de Charpentier)
Ya toda la familia se sentaba, palomitas en ristre, y comenzaba el espectáculo. Salían País tras País con sus representantes. Un pequeño video con banalidades tópicas del lugar donde venían (nosotros siempre seremos la España del flamenco, los Toros y Playas) y salía el director de orquesta representante del País (esto se ha perdido, tenía su gracia). Después ya salía el cantante y el grupo y comenzaba la actuación. La música difería bastante de lo que habíamos estado escuchando en la radio y la tele hasta el momento, porque no es lo mismo tocarla con grupo pop que con orquesta sinfónica.
Cuando salía españa, se paraba el País. Sólo había ojos para el vestido que le habían puesto a la cantante, que si fijate que exagerada, que que mal le queda, que si menudos tacones, que si el peinado... Luego venían los ...pues no lo hace mal, pues que poco se mueve, pues si ha desafinado en el estribillo...y una vez terminada la actuación...división de opiniones...este año ganamos o ...otro año que nos ganan los finlandeses...
Terminados los cantos, todos se sentaban en una especie de reservados para escuchar las votaciones...y aquí en nuestras casas las porras y las indignaciones..."Pues fijate, si nosotros les hemos dado a los alemanes 8 puntos y ellos ni uno"...mira, que majos los portugueses nos han dado 12...ya saben que si no les invadimos"..."mira los griegos que bien nos dieron 10, clarooo como la reina es griega"..."los franceses nos tienen asco...ni un triste punto que se habrán creido como que ellos lo hacen mejor...si es que es todo política....ya no vuelvo a comer una Baguete en mi vida"..."siempre igual, siempre igual!!!"...Y entre comentarios, puntos y otras hierbas, se nos desvanece la noche mágica de Eurovisón...llegando a lo sumo en esta década al tercer puesto de este grupo Bravo con su Lady Lady en 1984.
También os pongo el tema del 82. Fue Lucía con el tema "Él". (de aquel fracaso de Remedios Amaya y su naufragio con la barca ya nos habló Eden en un post...que risas de año!!!)
Y año tras año, hemos querido volver a ser los mejores en Europa, a base de canciones típicas, tópicas, con más y menos tino...pero va a ser que no!!