El Ajo Colorao es un plato típico de la zona de Vera (Almería) y de la región de Murcia. Se lo conoce también por otro nombre menos glamuroso que bien podría estar sacado de cualquier programa de José Mota o de los de Muchachada Nuí: "Atascaburras". No me veo yo yendo a un gastrobar o a un restaurante finolis y pidiendo una Copa de Mousse de Atascaburras o Aire de Ídem... Desde luego, el nombrecito se las trae, ja, ja... ¿A quién se le ocurre? Sólo con oír el nombre uno se ve engullendo algo que te puede hacer reventar la báscula y no hay nada más lejos de la realidad, pues es un plato relativamente ligero... En fin, el mundo de la nomenclatura es un misterio... Mientras reflexiono sobre ello, os dejo con la receta:
AJO COLORAO
Para 2 personas:
1 bandeja de migas de bacalao desaladas; 1 cebolla pequeña; 1 ñora; 1 tomate; 2 patatas medianas; 2 dientes de ajo pequeños; 1 cucharadita de pimentón dulce; 1 cucharada de miga de pan; agua; aceite; sal (si fuese necesario); perejil fresco picado; 1 huevo cocido.
Pelamos, lavamos y cortamos la cebolla en rodajas finas (no tan finas como para tortilla). Ponemos aceite en una cazuela (si es de barro, mejor) y añadimos las patatas, el bacalao, la cebolla pelada y partida en cuatro trozos o en dos si es pequeñita, el tomate lavado y partido también por la mitad y la ñora limpia de tallo y pepitas y partida a la mitad. Cubrimos con agua y dejamos cocer hasta que las patatas estén blanditas limpiando bien el caldo de la espuma que suelta en la primera cocción.
Mientras tanto, ponemos los dientes de ajo picados muy finitos en el mortero junto con el pimentón y majamos bien hasta obtener una pasta.
Una vez cocidas las patatas, sacamos la cebolla, el tomate y la ñora y las ponemos en el vaso de la batidora, le añadimos la miga de pan. Desleímos el majado del mortero con un poco de caldo y se lo añadimos al vaso. Mezclamos bien añadiendo aceite poco a poco mientras batimos para que ligue bien. Una vez listo, añadimos de nuevo a las patatas, removemos y dejamos cocer a fuego medio otros cinco minutos. Si nos queda mucho caldo, retiramos parte y trituramos el resto ligeramente con ayuda de la batidora hasta que quede una especie de crema. Es mejor ir añadiendo caldo poco a poco que batirlo y que nos quede como una sopa.
Servimos templado espolvoreando con perejil picado y decorando con un huevo cocido.
Es una receta ideal como primer plato pero la podéis servir también en cazuelitas de barro individuales para una cena o comida tipo buffet.
Yo sigo dándole vueltas, ¿A quién se le ocurriría el nombrecito...?
¡Feliz Domingo!