En un bol añadimos la mantequilla, el azúcar y mezclamos con una varilla manual hasta que la mezcla este cremosa, a continuación incorporamos el extracto de vainilla, el brandy y la ralladura de limón y mezclamos todo. En otro cuenco echamos la harina de trigo, la de maíz, el bicarbonato, la sal y la levadura, mezclamos con una cuchara de madera y vamos incorporando al cuenco anterior poco a poco mientras vamos removiendo mejor con la cuchara de madera, así sucesivamente hasta que tengamos toda la harina incorporada, al final nos sera mas como trabajar la masa con las manos. Hacemos una bola y envolvemos en film transparente, la dejaremos reposar en la nevera durante 2 horas, transcurrido este tiempo precalentamos el horno y extendemos con el rodillo nuestra masa entre dos hojas de papel de horno para que sea mas fácil y no se nos rompa y no tengamos que añadir harina a mayores.
Haremos la masa del grosor de una moneda de 50 céntimos, con ayuda de un cortapastas con forma de circulo, vamos haciendo nuestras galletas. Eliminamos los recortes de las galletas y pasamos el papel de hornear con las galletas a una bandeja de horno, y horneamos durante 12 minutos aproximadamente o hasta que adquieran un tono dorado, retiramos del horno y dejamos en la bandeja 2 minutos y a continuación las pasamos a una rejilla hasta que se enfríen. Mientras tanto vamos con el relleno, en un cuenco añadimos el dulce de leche y el chocolate derretido, trabajaremos esta mezcla hasta que este bien integrada y la introducimos en una manga pastelera. Cogemos una galleta y sobre la base añadimos una gruesa capa de crema, ponemos la tapa, apretamos con suavidad hasta que el relleno se asiente y sobresalga un poco del borde, ponemos el coco rallado en un plato y pasaremos los bordes de las galletas por el coco para que la crema lo agarre y espolvoreamos por encima con azúcar glass.