Una genial y robótica distopía soviética
Las distopías, son de esas temáticas que siempre han levantado una gran expectación entre todas aquellas personas con inquietudes y preguntas en sus vidas. En las que nuestra ansiosas mentes nos intentan llevar a esas "realidades" que nos muestran como hubieran sido si un hecho histórico no hubiese llevado los derroteros que se han terminado dando... y eso nos apasiona.
Y justamente bajo esa premisa, es donde nos encontramos en Atomic Heart y su URSS. Una historia particular, un mundo alternativo, y un juego de esos que saben cómo llenarte la mente de buenas ideas y particulares momentos que consiguen doblegar ante nosotros una experiencia tan única y esperpéntica bella como este genial Atomic Heart.
Como ya os estáis intuyendo, lo primero que quiero hacer es poneros en contexto. Y es que hay que tener bien claro que nos acercamos a una Unión Soviética a mediados de los años 50. En la que vemos cómo está fue la vencedora de la Segunda Guerra Mundial, todo gracias a un polímero que les hizo avanzar enormemente en electrónica en general, y en robótica en particular. Pero como era de esperar la cosa no sale para nada bien, y los robots se rebelan contra sus creadores y comienzan una masacre en la que nos veremos envueltos directamente.
Una historia que sorprende por su profundidad, emoción, dureza, e incluso terror. Dónde un interesante, y por momentos, muy sarcástico guion nos atrapa durante toda la aventura. Consiguiendo unas cualidades narrativas muy bien traídas. Un universo muy bien construido, supone una realmente atractiva parte argumental que sorprende a cada segundo que disfrutamos de este distópico mundo y todo el trasfondo que esconde.
Atomic Heart es uno de esos juegos que en base nos plantea en un juego de acción, aventura y narrativa, con tintes bastante especiales y únicos. Donde la importancia del diálogo, lo impecable del mundo que nos rodea, y una buena dosis de posibilidades jugables, nos van a absorber y hacer sentir muy dentro de su universo, y de toda esa tendencia robótica que envuelve está madre soviet utópica.
Una jugabilidad que más allá de los clásicas armas de acción cuerpo a cuerpo y a distancia, viene especialmente ligada a nuestro amigo "guante". El cual nos aportará una serie de habilidades y posibilidades únicas y particulares, que nos llevan un paso por delante de todos los demás. Entre las que podremos encontrar cualidades de control de físicas, escaneos de zonas, e incluso la utilización de diferentes objetos en nuestro beneficio. Terminando de potenciarse en unas eróticas estaciones llamadas Nora, que nos servirán como zona de cambio de polímeros por otras muchas habilidades y potenciaciones que nos abren un amplio abanico de acciones de combate e interacción.
Claro está que la parte armamentística también supone un factor importante dentro de la acción. Siendo muy interesante la necesidad de recoger diferentes elementos, materiales y planos, con los que poder construir y mejorar el amplio número de armas, a distancia y cuerpo a cuerpo, que posee el juego.
Y todo esto para adentrarnos en un combate realmente duro. En el que tendremos que estudiar y escanear al enemigo. Sabiendo encontrar sus debilidades y zonas corporales donde sufren más daño. Empezando desde ese momento a gestionar con sentido la mezcla de armas clásicas con esas potentes habilidades que nos proporciona nuestro amigo guante. Unido a la necesidad de gestionar con mucha precisión un sistema de esquiva que vais a tardar en coger el tempo exacto. Así que iros preparando, porque el combate va a ser duro y variado, especialmente cuando os encontréis con jefes algo más especiales. Por lo que adaptar la dificultad, entre los tres niveles que posee, seguramente tienda a la baja.
Esto nos acerca a un control ágil y preciso. Donde una buena interfaz, y una bien planteada gestión de armas y poderes para ser activadas con facilidad, consiguen que nos adaptemos y consignamos que cada acción se realice de forma muy intuitiva. Aunque también cabría decir, que alguna indicación más no hubiera venido mal para dejar más claro ciertos términos y opciones.
Una vez entendido las nociones principales. Deciros que el juego nos acerca a un mundo que sabe mezclar con inteligencia zonas muy lineales, con un amplio mundo abierto por el que nos podremos mover con total libertad a grandes distancias. Y aunque se siente algo vacío, supone una experiencia muy interesante y bien intercalada para que la aventura no pierda ritmo narrativo e intensidad en ningún momento.
Todo ello, nos mete en situaciones bien diferentes a la acción que encabeza la jugabilidad base de Atomic Hearts. Encontrándome con zonas plataformeras sencillas a la vez de bien planteadas. Con curiosos, y para nada, sencillos puzles de entorno. Y una interesante exploración en busca de secretos y recursos, le dan mucha más variedad y vida a la experiencia.
Por último deciros que la experiencia, más allá de entender que no es para nada sencilla, me ha durado en torno a las veinticinco horas. Siendo consciente de que hay muchas más cosas por hacer, secretos que descubrir, misiones que realizar y objetos que localizar. Pero en este tramo de horas será más que suficiente para disfrutar de gran parte de una experiencia realmente divertida, única, y llena de particulares propuestas.
APARTADO TÉCNICO GRÁFICOEntrando en el apartado visual. Comentaros que Atomic Heart es una auténtica belleza hecha videojuego. Con un diseño artístico de esos que te impresionan, te trasladan, y te absorben como pocos han conseguido hacer. Con una ambientación impecable. Unos diseños decorados, entre edificios, vegetaciones, y efectos de todo tipo, que no paran de dejarte ensimismados. Y todo ello acompañado con unos personajes realmente bien recreados, con buenas animaciones, y una importante personalidad, que terminan de adornar un apartado visual que te deja enamorado. Eso sí, algunos bugs me han roto en algún momento la experiencia, pero esperemos que sean solucionados en breve.
SONIDOPero la cosa no queda atrás en la parte sonora. Con un muy buen trabajo de ambientación sonora. Una más que bien planteada e implementada banda sonora donde la electrónica y el sonido tradicional ruso se mezclan. Y un doblaje al español tremendamente bien actuado.
CONCLUSIÓN Código digital proporcionado por Plaion NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS