[dropcap]H[/dropcap]ace unos años, el anisakis dejó de ser un ser vivo desconocido a formar parte del vocabulario usual de la gente, de todas maneras haremos una breve explicación, para aquellas personas que no sepan qué es y cómo actúa y ahora que vienen las fiestas de Navidad aumenta el consumo de pescado.
¿Qué es el anisakis?
El anisakis es un parásito nematodo (gusano) que vive en el medio marino, su ciclo vital es complejo, debido a que pasa por diferentes huéspedes en su proceso de crecimiento antes de llegar al ser humano. En primer lugar, los crustáceos (langosta, camarones, cangrejos, langostinos, etc.) se alimentan de las larvas de este gusano, éstas forman parte del organismo del crustáceo, y así pasan a formar parte de la cadena alimentaria de los animales. De modo que, cuando un pez o un cefalópodo (pulpo, calamar, etc) se comen un crustáceo infectado, el parásito se aloja en el intestino del nuevo huésped y la larva evoluciona a un estadio superior. Entonces los mamíferos marinos cuando se comen los peces infectados, el parásito termina su ciclo vital, es decir, se reproduce y dispone los huevos que son expulsados por los mamíferos marinos por las heces hacia el medio acuático y vuelve a empezar el ciclo vital. En consecuencia, cuando el ser humano se come el pescado o crustáceo infectado, este se introduce en nuestro organismo y provoca los diferentes síntomas que se derivan.
¿Dónde se sitúa el anisakis?
Normalmente este gusano se encuentra en el exterior de las vísceras, pero ocasionalmente también se puede encontrar en el músculo o bajo la piel de aquellos animales infectados. Entre las especies de pescado con mayor frecuencia que pueden contener este parásito, encontramos: la sardina, el bacalao, el arenque, el salmón, el abadejo, la merluza, la caballa, el bonito, el rape o el jurel. Este gusano llega al ser humano, por comer un pescado o crustáceos infectado crudo o poco cocinado. En cuanto a la población con más prevalencia de contraer este parásito son los japoneses, ya que comen gran cantidad de pescado crudo o poco cocinado.
Para las fiestas de Navidad, aumenta el consumo de pescado y crustáceos, por eso es importante vigilar el pescado y crustáceos que compramos, que sean de calidad, frescos y libres de anisakis, en caso de que haya anisakis o queráis aseguraros de que no haya debéis tomar ciertas medidas.
Qué medidas debemos tomar
Este parásitos no sobrevive a temperaturas extremas, es decir, a temperaturas de cocción (superior a 65 º C en el centro del alimento) o temperaturas de congelación (inferior a -20 º C durante 24h). De modo que, si queréis consumir pescado y crustáceos frescos sólo será necesario que os aseguréis de que ha sido bien cocido, en caso de que desea comer pescado crudo, lo tendrá que congelar posteriormente al menos durante 24 horas para asegurar que el parásito muere. Como a temperaturas de -20 º C o inferiores el agua se solidifica, también se solidificará el agua interna del parásito, de manera que las parte de las estructuras internas se destruirán y consecuentemente la muerte del parásito.
La enfermedad: la anisakiasis
Asimismo, la anisakiasis es la enfermedad provocada por la ingestión de anisakis. Horas después de la ingestión es cuando surgen los síntomas como dolor abdominal, náuseas y vómitos o síntomas de reacción alérgica, en cambio en personas con una historia de reacción alérgica puede provocarle una reacción anafiláctica.
Por tanto con medidas de prevención a la hora de consumir pescado y crustáceos, podemos evitar la intoxicación por este parásito.