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Tesoros de las abejas: la miel

Por Sentir @menjasa1

La miel es uno de los primeros edulcorantes utilizados por la humanidad. Se han encontrado pinturas rupestres donde se ven representadas escenas de recolección de miel. Por lo tanto estamos hablando de un alimento que nos lleva acompañando ya unos cuantos miles de años. Pero no sólo es la miel lo que tomamos de las abejas. Hay otros productos que también hemos aprendido a consumir a la vez que a apreciar sus beneficios. Estos son el polen, el pan de abeja y el propóleo.

La miel

MIEL: Las abejas son insectos nectarívors y unas incansables recolectoras de este producto que las flores les ofrecen. El néctar que llega a la colmena se va pasando a otras abejas, se mezcla con secreciones propias y finalmente se almacena dentro de las celdas, bien sellado. Este néctar sufrirá dos transformaciones importantes que darán como producto final la miel, alimento y despensa de toda la colonia.

  • Gracias a los enzimas secretados por las abejas las moléculas de glúcidos se rompen convirtiéndose glúcidos simples en su mayoría (fructosa, glucosa, ...)
  • El % de agua presente en el néctar pasa del 80% de media a no más del 20%, pudiendo aumentar, de esta manera la concentración de glúcidos y la vida útil del producto

Propiedades nutricionales de la miel

Lo que hace que este líquido espeso nos sea tan atractivo de consumir no es sólo su sabor dulce, también lo son sus características y composición nutricional.

La miel es aproximadamente el 80% azúcares (fructosa y glucosa principalmente y, en menor medida, sacarosa y maltosa), menos del 20% en forma de agua y una pequeña parte de aminoácidos, minerales, vitaminas, ácidos orgánicos y enzimas. Todos estos productos minoritarios estarán más o menos presentes en función de la procedencia del néctar, de las pequeñas cantidades de polen que hayan presentes y del proceso de manipulación de la miel por parte del hombre.

Básicamente podemos decir que la miel es un alimento predominantemente energético. Y, por tanto, es apto en situaciones donde existe un desgaste físico importante y las necesidades energéticas estén aumentadas: deportistas, trabajos físicos, época de crecimiento, fiebre, personas mayores ... Aún así siempre se tendrá presente la situación personal. Por ejemplo, en caso de diabetes se debe tener más cuidado con el consumo de miel.

Beneficios de tomar miel

  • Tiene una sustancia llamada ácido fórmico que ejerce función antiséptica
  • Contiene inhibina, un enzima con efecto antibiótico. La inhibina, sin embargo, es susceptible a la luz y al calor. Aún así también se dice que la baja presencia de bacterias se debe a su alta concentración en azúcares que impide su proliferación, no por acción de la inhibina
  • Es cicatrizante, expectorante, antitusivo (la OMS la recomienda como antitusígeno), es suavizante, desinfectante y actúa sobre la acidez de estómago.

Son estos, quizás, algunos de los motivos que hacen que uno tome miel cuando está resfriado ya que suaviza la garganta irritada, la calma, disminuye la tos, ayuda a expectorar y además desinfecta.

Evidentemente no se trata de un alimento milagroso pero sí es muy completo y nos puede ayudar a minimizar las incomodidades de los resfriados y "llevarlo" mejor.

El polen

Las abejas recogen el polen de las plantas y lo transportan pegado a sus patas gracias a pequeñas cantidades de saliva y néctar que segregan para no perderlo durante el viaje de regreso a la colmena. Una vez llegan van depositando las bolitas de polen dentro de las celdas junto con un poco de miel y propóleo hasta que se llenan. Así pues, las abejas no consumen el polen solo, sino que lo mezclan con otros compuestos. Son los apicultores que recogen este polen antes de que las abejas entren dentro la colmena y es lo que nosotros consumimos.

Propiedades nutricionales del polen

  • 66% de Hidratos de Carbono (1/4 parte en forma de almidón)
  • 20% Proteínas
  • 8% Lípidos
  • Vitaminas (grupo B, C y E según plantas de procedencia), minerales (potasio, calcio, magnesio, fósforo y sodio), enzimas, aminoácidos y ácidos orgánicos

Se toma como reconstituyente, en situaciones de desgaste físico y mental, estrés, cansancio y para evitar la aparición de resfriados, precisamente (que muchas veces aparece por una bajada de defensas fruto del estrés). A pesar de toda la información existente sobre sus beneficios debemos decir que hasta ahora los estudios realizados no han mostrado que el polen sea efectivo como suplemento y que la mejor manera de asegurar la salud de la persona son unos buenos hábitos alimentarios y de vida. Se estima que aproximadamente el 70% del polen lo eliminamos tal y como lo hemos ingerido ya que la exina, cubierta natural del polen, impide acceder al contenido total de nutrientes.

La dosis se encuentra entre ¼ y 1/8 de cucharadita al día. Sin embargo, al no existir estudios sobre la seguridad y eficacia del polen se hace difícil establecer una dosis recomendada.

El pan de abeja

es una mezcla de polen, miel y pequeñas cantidades de própolis que, por acción de diferentes bacterias, fermenta y acaba convirtiéndose en el pan de abeja. La humedad de la miel rompe la capa de exina y el polen comienza a transformarse gracias a diferentes factores:

  • Temperatura y humedad de las colmena, que favorecen el crecimiento de los microorganismos
  • Sustancias segregadas por las abejas, con presencia de enzimas
  • Los azúcares de la miel, sustrato conservador y alimento para microorganismos
  • Presencia de levaduras que fermentan los azúcares y bacterias del ácido láctico
  • Tiempo para que se produzcan las fermentaciones

Las condiciones ambientales y sustratos adecuados permite que las levaduras y bacterias realicen sus funciones.

  • Los azúcares se convierten en monosacáridos
  • Las levaduras y bacterias provocan fermentaciones, reduciendo el pH, y alargando la vida útil del producto resultante
  • Estas fermentaciones permiten que los nutrientes contenidos en los granos de polen sean más asimilables
  • Las bacterias incrementan el contenido de vitaminas del grupo B
  • Aumenta el contenido de vitamina K

A nivel nutricional, el pan de abeja es similar al polen, con una mayor concentración de glúcidos por la presencia de miel.

La dosis recomendada del pan de abeja va desde 2g/dia además de 30g/dia, dependiendo de la casa comercial.

El própoleo

Las abejas extraen una sustancia de los árboles que utilizan para sellar la colmena y combatir de esta manera la presencia de virus, hongos y bacterias. Estamos hablando, pues de un gran antibiótico. El 50% de su composición son resinas (de los árboles) y el resto es cera, aceites esenciales, polen y minerales.

El propóleo se comercializa en tinturas, aceites, cremas o pastillas y se administra en pequeñas dosis. Tradicionalmente la utilizamos para tratar infecciones de las vías respiratorias, boca y garganta, cándidas e incluso úlceras de estómago.

Científicamente se ha mostrado efectivo aplicado sobre herpes labial y genital, reduciendo el tiempo de curación y el dolor, ayudando a cicatrizar en menor tiempo. Después de la cirugía también mejora la cicatrización y reduce el dolor.

Sobre las úlceras, infecciones, problemas digestivos, boca y garganta, resfriados e inflamaciones no hay suficiente evidencia científica que lo avale.

Ya hace unos cuantos años que aprovechamos lo que las abejas recolectan y fabrican de manera incansable. La ciencia está poniendo al descubierto de qué están hechos estos productos y nos ayuda a identificar los beneficios que obtenemos de ellos, al tiempo que los posibles problemas. Recordemos que "natural" no es sinónimo de "inocuo" y que, al menos en el caso del polen, el pan de abeja y el propóleo, lo mejor es consultar con un profesional que nos asesore y nos indique cuáles son las dosis seguras en función de nuestros objetivos.


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