Al menos tres personas murieron y 23 resultaron heridas ayer en Caracas en el marco de las movilizaciones en rechazo y apoyo al presidente Nicolás Maduro. Estudiantes simpatizantes de la oposición, acompañados de varios políticos, se agolparon desde la mañana en la Plaza Venezuela, en el centro de la capital, para denunciar la política económica del gobierno y exigir la liberación de universitarios detenidos en los últimos días en protestas en el interior del país. Al mismo tiempo, oleadas de manifestantes vestidos de rojo, el color del chavismo, se dieron cita en distintas plazas de Caracas y otros estados del país para celebrar los 200 años de la denominada Batalla de la Victoria, con motivo de la cual se conmemora en Venezuela el Día de la Juventud.
A la concentración antichavista asistieron dirigentes opositores, como Henrique Capriles, gobernador de Miranda, la diputada María Corina Machado, Leopoldo López, de Voluntad Popular, y Antonio Ledezma, alcalde metropolitano de Caracas. En medio de banderas naranja, amarillas y azules, los colores de la oposición, se exigía la liberación de tres estudiantes tachirenses encarcelados, acusados de haber asediado la casa del gobernador Mora y se reclamó por la escasez de alimentos y productos básicos.
“No nos vamos a arrodillar, que le echen bola (empeño), vamos a ver quién puede más. ¡Tienen a nuestros estudiantes presos, los queremos libres!”, clamó David Smolansky, alcalde del municipio caraqueño de El Hatillo y ex dirigente estudiantil, mientras la multitud coreaba: “Y va a caer, y va a caer, este gobierno va a caer”. Medios opositores y organizaciones estudiantiles señalaron que cinco jóvenes resultaron heridos de bala el martes en Mérida, luego de que individuos en moto abrieran fuego contra la protesta. Los universitarios que encabezaron la marcha a la Fiscalía dijeron que no desistirían de su protesta hasta que sus compañeros sean liberados, alegando que las autoridades no tienen pruebas de que cometieran hechos fuera de la ley.