Revista Cocina
¡¡Hola a todos!! Volvemos con reto... un reto que me encanta, el de Desafío en la cocina... más que nada porque el grupo de gente que lo compone son increíbles y encima se curran muchísimo los desafíos, son desafíos en toda regla, os lo digo yo, jejeje!! Pistas rebuscadas, contraespionaje puro y duro y mucha diversión.
Este mes empiezan... ¡¡las vacaciones!! al menos en el Desafío, jejeje... que algunas no hemos hecho más que empezar, jejeje.... en cualquier caso las bosses este mes han decidido pasar el testigo y "coronar" temporalmente a las participantes más veteranas del desafío concediéndoles tres deseos, jejeje... qué, de donde, y porqué... una única condición que impuso Toñi... recetas con carne picada.
A partir de ahí y dependiendo del grupo en el que sin saber te hubieras apuntado (en mi caso en el equipo verde) las invitadas especiales del mes se habían repartido los continentes... ¡¡y el verde resultó Australia!! ¿os acordáis que hace un año también publiqué receta australiana con carne picada? sip, los chiko rolls.
Patricia, del Trasgu de las galletas ha elegidos un clásico anglosajón... un pastel de carne o meat pie... con carne picada, verduras y una salsa riquísima de cerveza rubia. Se puede comer frío o caliente, mejor recién hecho, claro... pero a nosotras nos sobró más de la mitad del pie y os puedo asegurar que como tentenpiés frío gana muchísimo, jejeje...
Yo no me he complicado la vida y a la hora de buscar receta busqué australian, meat pie y Jamie Oliver... y dicho y hecho... ¡¡claro que Jamie tenía receta de un meat pie australiano!!
Os dejo ya con mi receta que es, además, perfecta para comidas al aire libre, días de sol y playa y cenas en terracita, no digo más!!
Receta de aussie meat pie, o pastel australiano de carne.
Ingredientes para 8 raciones:
- 1/2 kilo carne picada de ternera, picada sólo 1 vez
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva
- 1 cebolla mediana
- 2 zanahoria
- 1 cerveza rubia
- 1 cucharada generosa de harina
- 1 cucharadita de tomate concentrado
- Romero fresco picado (opcional)
- 1 litro de agua
- 12 champiñones
- 2 láminas de pasta brisa
- 1 huevo batido
Modo de hacerlo:
1. Comenzamos salpimentando la carne picada y añadiéndole un par de cucharadas de aceite de oliva... la mezclamos bien sin apelmazarla y la añadimos a una sartén bien caliente para que se dore.
2. Mientras picamos finamente la cebolla y la zanahoria. Y en otra sartén caliente añadimos otras dos cucharadas de aceite, sofreímos ligeramente un poco de romero picado para que aumente el sabor del plato y añadimos nuestras verduras a la sartén... dejamos varios minutos que se doren bien.
3. Volviendo a la carne y una vez esté bien cocinada añadimos la cerveza rubia... como un vaso más o menos y removemos dejando que el alcohol evapore y el líquido se consuma en su mayor parte.
4. A continuación añadimos al guiso la cucharada de haria, el tomate concentrado, desglasamos todo con un poco de agua y dejamos cocinar otros 5 minutos.
5. Pasado ese tiempo y cuando veamos que la salsa ha espesado continuamos añadiendo las verduras, removemos bien de nuevo, añadimos los champiñones en láminas y finalmente cubrimos todo el guiso con agua.
6. Y dejamos cocinar a fuego medio al menos 40 minutos... Jamie lo deja más porque pone el doble de carne que además no es picada... así que mejor 40 minutos a fuego medio, tapado... y si veis que se seca mucho añadir más agua.
7. Mientras termina de hacerse el guiso precalentamos el horno a 200ºC calor arriba y abajo, sacamos la pasta brisa del frigorífico, extendemos bien con ayuda de un rodillo y engrasamos el molde que vayamos a utilizar con ayuda de un pincel.
8. A continuación extendemos por encima la masa, recortamos los bordes que nos hayan sobrado y añadimos el guiso de carne hasta rellenar del todo el molde.
9. Extendemos la otra lámina de pasta brisa por encima, recortamos también el exceso y con ayuda de los dedos o de un tenedor sellamos los bordes del pie.
10. Hacemos en el centro de la lámina una "chimenea" o corte en X con un cuchillo para que los vapores del guiso salgan por ahí, pincelamos con huevo batido y metemos al horno. Bajamos la temperatura a 180ºC y dejamos unos 20-30 minutos hasta que la cubierta esté dorada.
No es difícil, ¿verdad? Y os aseguro que es de repetir!! Muy rico ahora en verano con una ensalada, unas mazorcas de maíz o unos guisantes con menta... ñam!!!
Me voy a ver a donde han viajado los demás grupos de colores y qué recetas han preparado.... ummm!!
Nos vemos en un par de días... un besazo grande, Luz.