Sí, os he tenido muy abandonados durante mis vacaciones, aunque alguna recetilla ha habido; y la semana pasada entre que llegué en martes y que estuve con anginas no he hecho gran cosa. Pero ya estoy de vuelta, casi recuperada, y hoy quiero proponeros el azúcar invertido.
El azúcar invertido se utiliza en la bollería industrial, repostería, confitería y panadería, por su poder endulzante y porque hace que los productos se conserven tiernos durante más tiempo.
Hace bastante tiempo que hice azúcar invertido por primera vez y no le dí demasiado uso. Pero este año quiero probar al 100% sus propiedades para ver qué tal resultan los helados, los bizcochos y los panes que llevan azúcar.
En los helados el azúcar invertido ayuda a que no cristalicen y de esta forma resulten unos helados más cremosos y no tan "piedra", cosa que suele pasar con los helados y los polos que hacemos en casa.
Se utiliza sustituyendo una parte del azúcar indicado en la receta que queramos elaborar por azúcar invertido. Las proporciones a utilizar serían las siguientes:
- En panadería, sustituir un 50% de azúcar de la receta por azúcar invertido.
- En heladería, sustituir un 25% de azúcar de la receta por azúcar invertido.
- En bollería/pastelería entre un 10% y un 20% de azúcar de la receta por azúcar invertido.
Y ahora a por la receta que es bien fácil de hacer... sin termómetros, sin complicaciones!!!
Ingredientes:
- 150 ml de agua mineral
- 350 grs de azúcar blanquilla
- 1 sobre de ácido tartárico málico (color blanco)* = 3,3 grs
- 1 sobre de bicarbonato sódico (color morado)* = 2,2 grs
Preparación:
- Calentamos el agua en un cazo y cuando arranque a hervir echamos el azúcar y removemos bien hasta que esté disuelto.
- Añadimos el contenido del sobre blanco y mezclamos.
- Retiramos el cazo del fuego y echamos el contenido del sobre morado que creará una efervescencia.
- Removemos bien y una vez que quede todo homogéneo y sin burbujas lo ponemos en un tarro de cristal bien limpio y seco y dejamos que enfríe antes de meterlo en la nevera.
- Dura todo un año, pero asegúrate de poner la fecha en el tarro.
¿Has utilizado el azúcar invertido alguna vez?
Fuente: Tía Alia