Hace años que vi por primera vez un Rally Cross, eso sí, por televisión. Me parece un evento interesante donde el resultado es incierto hasta la última vuelta, uno de los factores que te hacen estar tensionado en todo momento. Las carreras son muy competitivas, hay saltos, roces, choques… Tenía ganas de poder verlo con mis propios ojos, o a través de mi lente.
Una vez allí, me sentí diferente a como me sentía con al resto de eventos deportivos a los que había asistido con anterioridad. Se trata de un evento automovilístico que invita mucho al usuario, los equipos están a la vista, las salas, los pilotos… y no solo para la prensa, si no para todas las personas que ese día se acercaron al circuito de Montmeló a ver el Barcelona RX.
Así que accedí a por mi acreditación y entré al circuito, una sensación rara para mí, ya que normalmente, en mi país, o estoy fuera en las gradas mirando el espectáculo o entro como piloto. Esta vez entré para tomar fotografías.
Logré estar cerca del equipo de Volkswaguen… Vi como trabajaban en sus coches, el stock de piezas y recambios era espectacular. Los mecánicos revisaban los coches para cada salida, se refleja un enorme carácter profesional en cada uno de ellos, no me esperaba menos de un evento FIA.
Estaba ansioso por ver empezar la carrera, pero yo no era el único, el público gritaba hasta el punto de quedarse sin voz, algunos ya tenían claro quien era su favorito.
Allí estaba, en medio del terreno de batalla del Barcelona RX. Sabía que iba a ser una batalla dura… pero no solo para ellos, para mí y el resto de fotógrafos también lo fue.
Me daba la sensación de que en algunos tramos los coches debían alcanzar aproximadamente los 150 km/h, la emoción se triplica cuando pasan a escasos centímetros de tí y te lanzan piedras como si fuesen balas.
Yo y los demás fotógrafos nos manteníamos continuamente en alerta. Tratábamos de hacer las fotos lo más rápido posible para que nos diese tiempo a escondernos tras los muros para evitar que cualquier cámara o alguno de nosotros mismos recibiéramos un pedrazo.
Una de las mejores zonas para sacar fotografías era justo después del salto, allí las piedras no volaban, pero si los coches, la inercia hacía que quedasen por momentos libres de contacto con la superficie.
Fuera de pista también teníamos algún seguidor que disfrutaba de experiencia. Tras el evento se animó a compartir algunas de sus fotografías en nuestro grupo de flickr #wedofreshimports. ¡Recuerda que tu también puedes unirte!
Decir que las carreras son cortas, eso implica moverte en muchas direcciones a toda velocidad si quieres conseguir un poco de variedad de imágenes, aunque es algo que se complica con tanto polvo y ruido, uno llega hasta el punto de desorientarse.
La final de la categoría reina del Barcelona RX, Peter Solberg no tenía muchas opciones de ganar, ya que salía en segunda fila, pero como bien he dicho al principio, hasta la última vuelta nada está cantado. Aprovechó un choque entre el primero y el segundo en la primera curva para colarse por el interior, todo un espectáculo, demostró claramente que es una de las personas que mejor maneja tanto en tierra como en asfalto, con sangre fría. A partir de ahí, nadie lo pudo parar.
Sin duda, el esfuerzo que hacen estos pilotos los deja a final de carrera totalmente deshidratados.
Estos son los resultados de la final. Al terminar la carrera, me impacto el momento en el que Solberg llega al podio y se da cuenta de que su equipo aún no había llegado, así que se puso a celebrar su triunfo con nosotros, los fotógrafos! Tuve la oportunidad de felicitarle y chocarle los cinco. Me pareció una persona humilde y muy cercana al público, al igual que el resto.
Los pilotos demostraron un gran compañerismo entre ellos, muchos son amigos, incluso familia, algunos celebraban sus triunfos con sus rivales. En ningún momento demostraron ningún tipo de rivalidad o ese secretismo que se siente en la F1.
¿Qué destacaría del Barcelona RX? Para empezar, el trato por parte de la organización fue de primera, tuve acceso a la sala VIP, tambíen a una sala de prensa con Internet, allí podíamos imprimirnos los resultados de cada carrera, además de transporte de la sala de prensa hasta el circuito.