Guiso de Trigo.
Este fin de semana se cierra la trilogía de Barra de Barras que se ha venido celebrando en El Rincón de Pepe con un más que merecido homenaje al más internacional de los cocineros que ha habido en nuestra tierra, Don Raimundo González Frutos. Tras los menús propuestos por Miquel Ruiz y Senén González para estas jornadas, en esta ocasión el homenaje consiste en la reinterpretación de alguno de los geniales platos que durante años han ido saliendo de la cocina de El Rincón de Pepe. Para ello, como si de Euristeo se tratara, los "Gastrologos" Antonio Jesús Gras y Roberto Fuentes, han propuesto a cinco importantes cocineros y a un extraordinario repostero ésta nada fácil tarea que han sabido resolver con una maestría acorde con los platos que reinterpretaban. El menú fue presentado con la presencia del propio homenajeado, quien como no podía ser de otro modo, acaparó la atención de todos y amenizó la velada con sus innumerables anécdotas de cocinero con algunos años de experiencia al servicio de la cocina. Cuando habla de quienes ha dado de comer, lo hace más como si de amigos se tratara que de clientes. Y, a pesar de decir por activa y por pasiva que no se merecía tal homenaje, cada anécdota que salía de su boca, justificaba todo este proyecto y lo empequeñecía.Alcachofas a la Manzanilla.
El menú elaborado para la ocasión consistía en siete "tapas", aunque el termino se les queda corto, más dos tapas dulces. Empezamos la cena con la interpretación del guiso de trigo. Una receta coral que presentan en un chupito aromatizado por hierba buena y decorado con cereales inflados que dan textura a la crema. Apenas tuvimos oportunidad de comentar este plato, nuestra atención estaba centrada en el homenajeado, que seguía con su retahíla de interesantísimas anécdotas que lo mismo hablaban de personajes de la talla de Ramón Gaya, como que saltaban a un desconocido cliente valenciano. La vida que ha llevado entre fogones, le permite hablar de "Manolete" o de Hemingway, como nosotros podemos hablar del vecino del quinto.La segunda tapa es la visión que Ginés Nicolás, jefe de cocina del Rincón, tiene de las alcachofas a la manzanilla con piñones y gambas servido en timbal. Aquí entran en juego las nuevas tecnologías que infusionan al vacío logrando conservar mejor los sabores. El timbal viene cubierto por un carpaccio de gamba. Todas estas tapas y las restantes maridan con un vino monastrell alicantino, Laderas del Sequé de 2012. Jesús Ortega, del Restaurante El Sordo de Ricote, toma el relevo y ofrece un sorprendente y limitado plato, ya que por sus características solamente se puede realizar durante un par de semanas a lo taquitos de jamón y un huevo de codorniz poché aromatizado con el finísimo aceite de la casa. ¿Que más se puede pedir?Caldero.
largo del año. Semanas que coinciden entre el final de la temporada de las habitas con la llegada de las almendras tiernas y gelatinosas. Si a estos dos ingredientes le sumamos unos Pues el plato típico, por antonomasia de nuestra cocina. El Caldero. La encargada de elaborar la tapa es Estrella Carrillo del Restaurante Santa Ana de Los Ramos y la innovación a su suave caldero de ñora y potente de azafrán es un crujiente de hoja de limonero, al estilo del paparajote, que aunque suene raro, es una autentico descubrimiento. -¡Brillante! Como no hay quinto malo, al llegar a la tapa con este número, Cayetano Gómez, único ausente en la cita al encontrarse de viaje, sorprende a propios y extraños con unas berenjenas a la crema, complejas tanto por los sabores como por las texturas. Mezcla un yogur de queso de cabra con el dulce miso para lograr la crema que empapa la berenjena cubriendo todo con una espuma de bechamel. Un imprescindible y va a dar mucho que hablar. Brillante de nuevo.Habitas a la murciana.
Llegados a este punto, no hay banquete que se precie de tal sin su carne y su pescado. Y aquí lo hay. El pescado a cargo de José María Alcaraz del Restaurante Los Churrascos de El Algar, es un lomo de dorada al vino blanco acompañado de espinacas fritas. Quizás sea la tapa que menos me gustó. Para terminar con los salados, el mítico nido de ternera al vino, a cargo de José Nicolás quien hizo doblete para homenajear al que en otra hora ocupaba su puesto al frente de la cocina del Rincón.Las dos tapas dulces vinieron de la mano de Juan Antonio Serrano, de la confitería Serrano de Santomera, quien, por no ser temporada, no pudo elaborar el sorbete de higos chumbos y nos tuvimos que contentar con un delicioso y refrescante puré de fresón. Y para finalizar, como guinda a todo esto, el plato que no podía faltar, la leche frita flambeada con una puesta en escena propia del siglo XIX pero que respeta la esencia de la original.
En resumen, estamos ante la oportunidad de disfrutar por penúltima vez de los platos del que en otra época no muy lejana, fue un primera espada, no ya solo de la cocina murciana, sino a nivel nacional. Una oportunidad de disfrutar de nuestra cocina en su máxima expresión de la mano de grandes cocineros locales a un precio bastante atractivo.
El Rincón de Pepe está en el número 34 de la calle Apóstoles de Murcia, y podemos reservar mesa para degustar el menú en el teléfono 968212239.
Berenjenas a la crema.