Quizá se pusieron demasiadas expectativas en esta feria y a los organizadores, Abstract y I Love Cookies, les pedíamos un listón muy alto... Pensábamos (o al menos yo) que habrían aprendido de ExpoTarta, de la cantidad de gente que acudió a aquella feria, de los problemas que hubo para entrar, del poco espacio... Pensaba que de los errores que tuvieron los primeros por ser la primera feria que recibía a tanta gente, aprenderían los siguientes, que la cosa iría mucho mejor...
Y al principio lo parecía. Hace meses cambiaron el lugar de celebración (que iba a ser en un hotel como el resto de ferias) por un pabellón de 3500m2 en la Fira de Barcelona (cito de su página) "debido al éxito de la convocatoria y la gran aceptación de público", e incluso el haber pensado que los cursos comenzaran media hora antes de abrir las puertas de la feria me pareció una idea genial. Eso nos permitiría llegar puntuales a los cursos, sin problemas y encima saltarnos las colas. Sobre las entradas, han sido más caras que las otras ferias a las que he asistido: 5 euros en algunos puntos de venta que se agotaron bastante rápido, 6 si lo comprabas por internet con los gastos de gestión y 8 en taquilla. Había descuento si comprabas los 2 días y estaba incluido en el precio de los cursos. Expotarta cobraba 1 euro que lo destinaba a Médicos del Mundo. La inscripción en los concursos al principio costaba 100 euros por pieza (no por participante)... aparecieron bastantes críticas en su página y, no sé si por este motivo o por la falta de participantes, a principios de noviembre lo rebajaron a 50 euros y ampliaron los premios incluyendo algunos cursos. Vaaaale, las comparaciones son odiosas pero en la ya nombrada Expotarta solo costaba 10€ y dejabas la creación el mismo sábado, con lo que no tenías que ir un día antes como pedían en BCN&Cakes.
En fin, vamos con mi día en la feria. Yo llegué a las 9:00 de la mañana para realizar el curso de iniciación a tartas fondant que impartió Natalia de Dulces Ilusiones. Ya había algo de cola para comprar las entradas pero como sabía que habían anunciado por Facebook que la venta en taquilla estaba limitada a 2.000 para el sábado, no me sorprendió tanto (sé que todas queremos estar las primeras en estos saraos jaja), aunque sí que recuerdo que comenté con otras compañeras del curso la cantidad de gente que ya estaba esperando cuando faltaba más de media hora para abrir las puertas...
Nos metimos en el curso y las 3 horas se me pasaron volando. Natalia es simpatiquísima y aprendí muchas cosas útiles, además de un montón de ideas que iba dando para aplicar sus técnicas a otros dulces. La verdad es que la clase fluyó tan deprisa que ni me paré a hacer fotos, de hecho es que ni me acordé de la cámara hasta casi el final de la clase jajaja. Menos mal que cuando llegué a casa mi hermana me hizo algunas fotillos con mi primera tarta de fondant pintada a mano y la figurita de una simpática ovejita que, aunque suele estar mal visto halagar lo que uno ha hecho, creo que es la ovejita más bonita y adorable de todas, tanto que me ha robado el corazón jajaja (para que os creáis mis palabras por favor, no visitéis ahora mismo la página de Natalia jajaja).
Como parece ser costumbre en todas las ferias a las que he asistido, el aire acondicionado no funcionaba en el aula, así que como estábamos en la parte superior del edificio y apartados del bullicio, nos abrieron las puertas para airear un poco el ambiente y nos quedamos pasmadas con lo que comenzamos a oír. Silbidos, abucheos y gritos que decían algo como ¡queremos entrar!
Yo me quedé de piedra y entonces escuchamos un aviso por megafonía en el que comentaban que habían cerrado el acceso al recinto por seguridad ya que el aforo estaba cubierto y que se disculpaban por la espera... Pensé que se solucionaría pero entonces alguien comentó que la cola ¡llegaba hasta Plaza de España! Para los que no conozcáis esta bonita ciudad, a la izquierda tenéis un plano con un caminito de estrellas y os tenéis que imaginar mogollón de gente en cada una de ellas ya que no estaban esperando precisamente en fila india...
Yo había quedado con mi hermana para recorrer la feria juntas y en cuanto acabó la clase me llamó para decirme que era imposible entrar por la mañana. Se había acercado a la entrada pensando que la cola era para la gente que tenía que comprar las entradas en taquilla y resultó que la gente que estaba esperando tenían las de venta anticipada, e incluso algunas personas le comentaron que estaban esperando desde las 10 de la mañana para entrar. Además habían llegado los antidisturbios por el volumen de gente y alguien me comentó que había habido una pequeña avalancha, aunque esto no he podido confirmarlo...
Acto seguido dejaron de vender entradas en taquilla, anularon las que tenían previstas para el domingo y pidieron que no viniera todo el mundo a la vez, que intentaran distribuirse a lo largo del día, os podréis imaginar como se caldeó el ambiente en las redes sociales jeje por muchas disculpas que pidieran, habían cientos de personas en la calle que habían venido desde diferentes lugares de España solo para ver esta feria...
En fin, que me encontré sola en medio de la feria y si no llega a ser por que mi amiga Adriana de It's Cupcake Time Barcelona tenía un stand, creo que me hubiera ido a casa del bajón que me dio... Fui en busca de su stand y me encontré con su marido. No estaba seguro de si ella iba a entrar de nuevo ya que había salido en busca de más cupcakes y los que estaban controlando la entrada le dijeron que no sabían si le iban a poder dejar entrar más adelante, aunque tuviera un stand...
Con Adriana, de It's Cupcake Time Barcelona
Al final no hubo ningún problema, pero os aseguro que nos pusimos tensos conforme se acercaba la hora en la que ella tenía que volver y no aparecía... ¡creo que en mi vida he mirado más el reloj!Aunque di un par de vueltas sola, al final rapté a Adriana un rato y tuvimos la excusa perfecta para hacer las últimas compras y que ella se diera un buen capricho comprándose nada más y nada menos que uno de los preciosos delantales de Los Delantales. Maica y su marido fueron simpatiquísimos y ella no dudó ni un segundo en posar con nosotras mostrando una de las novedades que trajo a la feria ¡están pensando en hacer una chaquetas de cocina con sus estampados! ¿a queda súper elegante?
Con Adriana de It's Cupcake Time Barcelona y Maica de Los Delantales
Al final y pese al calor asfixiante que hacía aguanté en la feria hasta las cinco y media de la tarde y, como curiosidad, cuando salí todavía había gente haciendo cola para entrar...Parece ser que el domingo la feria funcionó mejor pero yo, que tenía entrada para los dos días, ni me planteé volver a pasar por ahí. Es una lástima haberme quedado con esta sensación después de los meses que estuvimos esperándola.
Sé que la opinión que os he mostrado es muy personal y poco positiva, y que la gente que estaba detrás de los stands atendiéndonos a todos con su mejor sonrisa no se lo merecen, pero yo no disfruté de esta feria. Era la primera que iba a pasar con mi hermana, a mostrarle un poquito más de que va mi afición ya que por la distancia solo puede verla en fotos y se quedó fuera... Y lo peor de todo es que a cientos de personas les pasó lo mismo.
Supongo que los afectados ya lo habrán visto, pero por si acaso aquí os dejo el enlace al último comunicado que han colgado explicando como reclamar el dinero de las entradas del sábado.
Me han desilusionado mucho... No sé si nos veremos en otras ferias...