Revista Cocina
En Almería, mi tierra hay buen clima y muchas horas de sol, es un lugar ideal para cultivar berenjenas, éste fruto nace de plantas de gran porte, con tallos espinosos y grandes flores, el resultado es una baya que está compuesta mayormente por agua en su interior, una carne porosa y jugosa que resulta muy ligera y tiene muy pocas calorías.
Las plantas de las berenjenas son un espectáculo cuando están en su mayor momento de producción, planta enorme y de hojas grandes y espinosas, a la que se le ponen tutores para que se asolanen las flores y los frutos y que no toquen el suelo, así es más fácil su recolección y no se estropea la piel de las berenjenas por el contacto con el suelo, garantizando el buen tamaño de los frutos y la calidad.
Para éste receta he usado la berenjena rallada, ésta es un poco más pequeña que la de piel oscura, su carne es más blanca y prieta y apenas tiene semillas en su interior, la he pedido a una empresa de Almería que comercializa y exporta el genero de sus productores y además tiene comercio inmediato a los cliente a través de su tienda online que se llama La despensa de Eurosol , que me la sirvió super rápido, muy buen servicio y un espectacular surtido de las mejores verduras de Almería, además con la garantía de que en ésta empresa, fueron los primeros de España en tener la certificación Aenor de producción integrada, un plus de calidad y desarrollo sostenible.
Al hacer el pedido ya aproveche para probar un buen elenco de los productos que comercializan, que frescura!!! que calidad!!! los calabacines tienen sus pelitos intactos, los pimientos huelen y las berenjenas "chirrían" jajajaja, la verdura fresca cuando se roza entre ella, hace un sonido muy especial, cuando la verdura es fresca, su calidad es excepcional, ya lo comprobaréis; yo he disfrutado de lo lindo de mis tomatitos cherry super frescos y sabrosos, los mini pepinos uhmmmm!!! y de éstas berenjenas que están deliciosas.
2 berenjenas rayadas 1 pimiento rojo tierno1 cebolla grande muy tiernaun tallito pequeño de jenjibre fresco2 cucharadas de aceite de sabor neutro(girasol o sésamo)salcilantro fresco
Para hacer la salsa hoisin
1 diente de ajo 2 cucharadas de mantequilla de cacahuete (mejor si tiene trocitos)6 cucharadas de salsa de soja2 cucharadas de mirín (vinagre de arroz)2 cucharadas de aceite de sésamo2 cucharadas de salsa perrins2 cucharadas de miel o sirope de ágave1 cucharada de miso
Para el arroz jazmín
200 gr. de arroz jazmin (arroz largo muy aromático)
Cortamos las berenjenas en tiras de medio centímetro, dejando la piel o pelada, como más os guste, ponemos los trozos en un bol cubiertos con agua con sal durante el tiempo que usemos para preparar el resto de la receta.
Elaboramos la salsa miso con la que vamos a condimentar el plato, para ello, mezclamos con un procesador todos los ingredientes hasta obtener una pasta cremosa y untuosa.
Por otro lado, enjuagamos el arroz en el grifo y lo ponemos a cocer con un poco de sal, el doble de agua que de arroz, durante unos 14 minutos a fuego medio.
Mientras que se cocina el arroz, en una cacerola grande, ponemos un chorrito de aceite suave, solo mojar la base, podemos usar aceite de girasol o de sésamo.
Añadimos la cebolla en tiras grandes, el pimiento en tiras, unos trocitos de jenjibre y salteamos durante unos minutos, mientras que se saltea, sacamos y escurrimos las berenjenas quitándoles la humedad con un paño o papel de cocina, añadimos a la cacerola y salteamos junto con las verduras, añadiendo un poco de sal y tapando con una tapadera para que las verduras suden y se ablanden.
Cuando las rodajas de berenjena y el resto de verduras estén blandas, añadimos la salsa hoisin y removemos con cuidado para que se integre la salsa con las verduras y cocinamos unos minutos más.
Servimos una ración de arroz jazmín, encima ponemos una porción de berenjenas y terminamos el plato con un poco de cilantro fresco picado a grosso modo.