El próximo viernes 12 de septiembre se estrena en las carteleras españolas la película "Betibú", una coproducción entre Argentina y España dirigia por Miguel Cohan, siendo éste su segundo largometraje, tras Sin retorno (2010), y protagonizado por Mercedes Morán, Alberto Ammann, y José Coronado.La historia da comienzo cuando el poderoso empresario Pedro Chazarreta es hallado muerto, en una exclusiva urbanización de las afueras de Buenos Aires. Para dar cobertura a lo que, sin duda, será la noticia del año, el director (Jose Coronado) del periódico de mayor circulación del país convoca a la prestigiosa novelista Betibú (Mercedes Morán) para escribir una serie de columnas sobre el caso. La escritora, se involucrará poco a poco en la investigación y, con la ayuda de dos periodistas de policiales (Daniel Fanego y Alberto Ammann), descubrirá que la muerte del empresario es sólo el primer eslabón de una serie de asesinatos de hombres poderosos que comparten un oscuro pasado común.
¿Qué ocultan las noticias que todos los días leemos en la sección de policiales de un diario? ¿Cuál es el verdadero motivo detrás de todas esas muertes? ¿Quién gana con la construcción de un relato periodístico morboso y tranquilizador?
El director argetino Miguel Cohan, en el set de rodaje.
Su director, Miguel Cohan, nos comenta al respecto: "Estas son algunas de las preguntas que me surgieron a medida que leía la novela Betibú de Claudia Piñeiro. Siguiendo los pasos de una escritora de policiales que ya no escribe, la novela cuestiona la verdad y la objetividad del relato periodístico, y lo hace mediante una entretenida trama policial y con personajes muy potentes. Cuando, al terminar la novela, descubrí qué se esconde detrás de una serie de crímenes aparentemente inconexos, supe que tenía que hacer esta película.""La escritura del guión fue tan ardua como placentera. Intentamos (junto a Ana Cohan, coguionista) jugar con las reglas del policial clásico, las tergiversamos para cuestionarlas, buscamos ponerlas en evidencia o simplemente nos divertimos con ellas. Todo valía para trasladar a la pantalla los personajes, la historia y las preguntas que Betibú nos había logrado despertar.""Una de las razones por las cuales tuve claro que quería adaptar Betibú eran las grandes posibilidades puramente cinematográficas que me presentaba como director. A mi primera película, Sin Retorno, habíamos decidido filmarla de la manera más seca y contenida posible. Betibú, tanto en su adaptación como en su forma, me pedía todo lo contrario."
